La Municipalidad clausuró este lunes una remisería clandestina que había sido denunciada por vecinos de la zona sur. El lugar fue registrado por la Guardia Urbana Municipal (GUM), la cual comprobó que no tenía la habilitación para brindar servicios a pasajeros.
Según informó la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana, el comercio funcionaba en un inmueble de Lamadrid al 1800, donde además se comprobó que había un taller mecánico sin el permiso municipal correspondiente.
En las oficinas de la remisería se secuestró un teléfono fijo, dos handys y una serie de cuadernos donde constaban los viajes que realizaban los vehículos.