El dueño del auto que explotó en la zona de La Fluvial, tuvo un gesto heroico que evitó que se hayan producido heridos o mayores daños materiales durante el siniestro.
Nelson había dejado su Peugeot Partner estacionada frente a la Guardería del Centro. Se dedica a reparar embarcaciones, y además de valiosas herramientas de trabajo, llevaba en el interior del utilitario una serie repuestos para clientes.
Momentos después de descender del vehículo, vio que algo en el interior del mismo comenzó a arder. Junto a un grupo de personas que estaba en el lugar, intentó sofocar las llamas, pero fue imposible.
Al tener el tubo de GNC, sabía que una explosión se podía producir de un momento a otro. Entonces decidió dejarlo todo y empujar el vehículo hasta una zona más despejada, para resguardar a otros autos y evitar lesionados.
Mientras se aguardaba la llegada de Bomberos Zapadores, la Partner explotó y las pérdidas fueron totales. El estallido avivó las llamas y generó un enorme temblor en los edificios linderos. Jóvenes registraron el momento preciso en un video.
Momentos después los bomberos pudieron sofocar el fuego y personal del Sies atendió a Nelson, quien pese a no sufrir lesiones, quedó en shock ante el tremendo episodio vivido.
El conductor del vehículo fue atendido en el lugar por personal del Sies, aunque su estado general era bueno, más allá de la lógica conmoción por el hecho.
(Fotografía: Virginia Benedetto)