Una familia de siete personas quedó en riesgo de perder su hogar como resultado de un juicio que comenzó hace seis años a partir de la muerte de la dueña anterior de la vivienda que habían acordado comprar en cuotas. Ante la llegada de la policía y funcionarios judiciales este miércoles para notificarlos sobre el desalojo, sus vecinos y amigos organizaron un abrazo solidario para pedir que se revea la situación.
"Cuando ella murió, en el testamento hizo un voto de pobreza y la Obra Cardenal Ferrari tomó posesión de todas sus propiedades", relató Hernán Farías, quien lleva casi 30 años instalado en la planta alta ubicada sobre Rioja 685.
En contacto con LT8, el titular del inmueble se quejó de que el juez de la causa no tomó como prueba el boleto de compraventa y "tampoco le hizo lugar a los testigos" que presentaron durante el litigio con la entidad que dependen del Arzobispado de Buenos Aires.