Los niveles de violencia que vive la ciudad y la región, sirvieron para que un grupo de emprendedores consiguieran desarrollar un emprendimeinto que intenta dar servicio en medio de la angustia que acarrea un episodio que puede terminar en heridos o víctimas fatales.
Rosarinos hace poco más de un año están al frente de la firma Biodest, encargada de volver "habitables" espacios que pueden haber quedado contaminados con elementos biológicos como sangre y fluidos humanos.
La compañía logró trascendencia por promocionarse como "especialistas en limpiar escenas del crimen", siempre y cuando los fiscales terminen su trabajo y ya no haya compromiso en afectar una investigación judicial.
"Cuando hay un fallecimiento, sea violento o no, dentro de un inmueble, la familia usualmente no se muda de la casa", indicó Georgina Bilancioni, en declaraciones al diario La Capital y sumó: "es aquí donde entra en acción nuestra empresa, limpiando y descontaminando la escena, sacando cualquier rastro o amenaza biológica del lugar, volviéndolo nuevamente habitable".
La firma anuncia servicios desde los 500 pesos para descontaminar un auto o vivienda de cualquier resto biológico.
La estrategia comercial puesta en marcha por la empresa se apalanca en el número de homicidios registrados en Rosario en el último año. En 2016 se registraron 181 muertes violentas, un número sensiblemente menor al de 2013, que tuvo 271 crímenes, pero que sigue dejando el dato alarmante de 14,4 asesinatos cada cien mil habitantes, por encima de otras ciudades con igual población, como Córdoba.
