El avance del fuego al otro lado del Paraná se reactivó y el humo en Rosario empezó a sentirse con fuerza este lunes. El Gobierno de Santa Fe defendió las acciones actuales y aseguran que la solución de fondo "está encaminada", aunque ambientalistas decidieron cruzar para apagar el fuego por sus propios medios en algunos sectores.
"Tenemos que trabajar coordinadamente. Se está haciendo y soy testigo de la fuerza que le pone el Gobierno nacional para ir avanzando. No es fácil cuando son varias jurisdicciones", argumentó el ministro de Gobierno, Justicia, Derechos Humanos y Diversidad de la provincia, Esteban Borgonovo.
El funcionario admitió este martes ante la consulta de Radio 2 que "no es fácil" controlar un área tan grande en el Delta y consideró que lo importante es "sentar las bases para que esta situación no se repita indefinidamente". Al mismo tiempo, advirtió sobre los tiempos para una respuesta sustentable: "No lo vamos a ver en lo inmediato este verano, pero no creo que haya solución que no sea un área protegida".
"Entre Ríos está sentada en la mesa avanzando en esta tarea conjunta", enfatizó Borgonovo sobre la principal destinataria de las críticas por el ecocidio. Al respecto, la Multisectorial Humedales cuestionó la "inacción cómplice del Estado, que sólo atina a torpes pronunciamientos" y dio cuenta de nuevos operativos con voluntarios para tratar de frenar las llamas en las islas.
Los ambientalistas mostraron parte del despliegue que realizaron el último domingo a la altura del kilómetro 28 de la Ruta Nacional 174 que conecta el puente con Victoria. Al respecto detallaron que algunos se quedaron allí mientras el resto se preparaba ese martes para regresar con otros colaboradores y más elementos para apagar nuevos focos.
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