La muerte del joven Carlos Orellano, que concurrió al boliche Ming River y apareció horas después muerto en el río Paraná, reavivó el debate en torno al funcionamiento de los espacios reservados en las discotecas, denominados VIP's. Es que la familia de la víctima asegura que el chico fue golpeado por personal de seguridad del local cuando pretendía ingresar al VIP sin la pulsera correspondiente. En el Concejo Municipal ahora buscan impulsar un proyecto para eliminar dichos sitios.
El plan propone una modificación en la ordenanza 7.218 que regula los espectáculos públicos a fin de prohibir los sectores reservados a determinadas personas a las que se les pretenda dispensar un trato diferenciado o discriminatorio al resto de los asistentes.
La iniciativa fue abordada en su momento por el ex edil Diego Giuliano y ahora es retomada por Eduardo Toniolli, Norma López, Alejandra Gómez Sáenz y la presidenta de cuerpo deliberativo María Eugenia Schmuck.
"Se trata de lugares donde el criterio para dejar entrar o no es estético. Esas características en casos mas extremos configuran discriminación y violencia", indicó Toniolli en declaraciones a LT8 para defender la modificación de la norma.
El concejal se encargó de diferenciar lo que ocurre en algunos espectáculos o shows, donde un asistente paga por un espacio diferenciado para acceder a una mejor ubicación o tener un mejor servicio. "En determinados rubros, negocios o espectáculos existen distintas ubicaciones y ello no determinan discriminación", aclaró.
"Creemos que la modificación se puede aplicar para erradicar una práctica. Es un proyecto que veníamos trabajando con el ex concejal Diego Giuliano. Hay una ordenanza muy completa del 96' que sanciona la discriminación", se amparó Toniolli.
Para el edil la decisión para que una persona entre al VIP esconde una maniobra discriminatoria, que "no siempre está vinculado con lo económico, sino con un proceso de selección que los dueños de los boliches hacen de determinadas personas en función de algún aspecto estético que consideran que debe valorarse por encima de otros".
Otra iniciativa
El concejal Marcelo Megna, por su parte, promueve otra acción que no quiere prohibir, sino refuncionalizar los VIP, incluso con cambio de nombre. El proyecto busca determinar pautas certeras para la admisión y acceso a éstos sectores denominados "VIP" (siglas en inglés de very important people, gente muy importante) en base a condiciones objetivas tales como la edad, o el pago diferencial de una entrada.
Para Megna “los dueños de los locales no pueden elegir a las personas que entran a los VIP según su condición social, vestimenta o apariencia física como ocurre frecuentemente por éstos días” esto genera trato desigual".
La iniciativa establece que las entradas/pulseras de acceso a los sectores diferenciales se ofrezcan luego de informar con claridad que se encuentran disponibles entradas generales y que ambas son accesibles para todos.