En un radio de 15 cuadras en zona sur se produjeron en los últimos diez días al menos tres violentos hechos con balaceras que arrojaron dos heridos y un muerto. Los vecinos denuncian una ola de inseguridad.
El último de los hechos ocurrió este miércoles alrededor de las 18:30 en el monoblock 14 del Fonavi de Ovidio Lagos y Virasoro. Sujetos en moto pasaron por el lugar y dispararon directamente contra Roberto J., de 43 años, quien resultó lesionado en su pierna izquierda.
El hecho ocurrió a plena luz del día, en momentos en los que había mucha gente en la zona. La víctima fue asistida por vecinos y trasladada hasta el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde se repone favorablemente. El tirador escapó en moto con su cómplice.
A tres cuadras de allí, el sábado 18 de enero a las 21 se produjo un crimen. Miguel Ángel Gómez, de 51 años, fue baleado en la cabeza al lado de su Volkswagen Suran en Amenábar al 2700. Pese a que lo asistieron médicos del Sies, no sobrevivió.
Gómez era un remisero que vivía en ese barrio, conocido como Latinoamérica. Allí hace dos años y medio se produjo el asesinato de un taxista que derivó en un paro de 24 horas por parte de sus compañeros. En esta oportunidad, los investigadores no advirtieron la falta de elementos personales u objetos de valor.
Volviendo a este 2020, y a unas cuadras de la zona, el 20 de enero hubo otro feroz ataque. Dos jóvenes en moto pasaron armados por Amenábar al 1400 y efectuaron varios disparos contra un grupo de jóvenes con quienes tendrían problemas de vieja data. Una chica de 14 años recibió un tiro en una pierna y un roce de bala en la espalda, aunque quedó fuera de peligro.
El último domingo por la tarde, un hombre ingresó armado a la sede del club Provincial de 27 de Febrero y Rodríguez y asaltó la portería. Se llevó celulares, dinero en efectivo y un handy, pero fue detenido por la policía en el Fonavi de Ovidio Lagos y Amenábar. Le secuestraron un revólver calibre 32 y los elementos robados.
Además, cada vez son más los casos de asaltos a jóvenes que acuden o salen del mencionado club, ya sea de su sede o del denominado country ubicado a pocas cuadras (Jorge Cura al 2300). La zona parece haber sido copada por bandas delictivas que roban todo a su paso y se enfrentan en violentas disputas territoriales, sin ningún tipo de control.