Después de cumplir con creces en su último compromiso de la Liga, Lionel Messi arribó este domingo a Rosario para reunirse con su familia de cara a las fiestas de fin de año. La estrella del Barcelona viajó en su avión privado y se retiró al volante de una camioneta.
Mientras su esposa Antonela Roccuzzo calienta motores en redes sociales con algunos regalos navideños para sus hijos, el futbolista llegó por la mañana al Aeropuerto Internacional "Islas Malvinas" en la última e infaltable parada de su año deportivo.
Después de contribuir con un golazo para vencer al Alavés y mantenerse en el primer puesto del torneo español, la "Pulga" no perdió tiempo y se subió al Gulfstream G550 que adquirió para despegarse de los servicios chárter y vuelos comerciales.
Después de su llegada a la terminal de Fisherton, las primeras fotos de cortesía en redes sociales no se hicieron esperar. A ellas se sumó el registro de su retirada desde la aeroestación, donde se puso al volante de una Range Rover para ir al reencuentro con sus seres queridos en la mitad de la temporada europea.
