"Voy a ser el mejor invitado", dijo Rodrigo, hermano de Messi cuando salió de la terminal y fue a buscar su auto en el estacionamiento del Aeropuerto Islas Malvinas. El joven viajó con el astro en el jet privado que aterrizó en Rosario pasadas las 8 de la mañana y fue el único que enfrentó a la prensa.
"Estamos muy conformes. Hasta donde yo sé siempre se habló de Rosario", amplió Rodrigo ante la consulta de los periodistas sobre si alguna vez se especuló con organizar la boda entre Lionel y Antonella Roccuzzo en otro sitio que no sea su ciudad natal.
Toda la familia viajó desde Barcelona, pero a diferencia de su hermano, el capitán de la Selección bajó del avión y se subió desde la plataforma a una camioneta manejada por su papá Jorge y no tomó contacto con la prensa.
"Puedo decir que él está contento y nosotros estamos apoyándolo", finalizó Rodrigo antes de subirse al auto.