La crisis se profundiza, y cada vez son más los inquilinos y propietarios que frente a la suba de impuestos, y sobre todo de servicios, optan por dejar de abonar las expensas. Ante este panorama, se incrementaron en un 25% las acciones judiciales por la morosidad en el pago de las mismas.
"La morosidad en pago de expensas está en el orden del 23% al 27%, y va en ascenso, lo que desfinancia a buena parte de los consorcios", indicó Ariel D'Orazio de la Concejalía Popular de Rosario.
En diálogo con Canal 3, destacó que estos morosos terminan sobrecargando al resto de los consorcistas, que deben hacer frente a recargos por demoras en la cancelación de gastos generales como impuestos, servicios, salarios y aportes, en el caso de los edificios con portero.
"Estos atrasos llevan a que las expensas cada vez sean mayores, y también han disparado la litigiosidad laboral en torno a un 25%", manifestó el también Coordinador del Consejo Asesor de Vivienda en la Oficina del Consumidor.
D’Orazio dijo que generalmente el administrador aguarda tres meses, y superado ese periodo sin que la persona pague, se inicia el proceso judicial con carta documento.