Detuvieron a una decena de policías acusados de haber plantado un arma de fuego a dos sospechosos a los que se persiguió de norte a sur. Serán imputados el jueves.
El hecho comenzó en Carrasco y Gurruchaga a la 1 de la madrugada, cuando policías procedieron a identificar a dos personas que se trasladaban en moto. Los ocupantes del vehículo hicieron caso omiso y se dieron a la fuga. La persecución fue sumando varias unidades, y a la altura de Santiago y San Juan uno de los móviles chocó.
Un patrullero logró interceptarlos en Buenos Aires y Casablanca. El conductor de la moto perdió el control y derrapó, por lo que se lo detuvo. Por su parte el acompañante escapó a pie y fue capturado en Entre Ríos y Chopin.
Luego se avanzó con el acta de procedimiento, pero hubo una serie de discrepancias entre lo declarado por los policías que iniciaron la persecución y los que se sumaron después y lograron el arresto. La más importante tenía que ver con el supuesto secuestro de un revólver calibre 32 con la numeración limada y 6 vainas percutadas.
Hubo una discusión, y los dos agentes policiales que detuvieron a los individuos se negaron a firmar el acta de aprehensión. Se da aviso a la Fiscalía de Flagrancia en turno, que solicitó que sean enviadas todas las actuaciones y se de intervención a División Judiciales.
En la mañana de este martes se tomó declaración a los dos policías que logran la aprehensión y ratifican que al momento de la detención de los sindicados no secuestraron ningún arma de fuego o elemento de peligrosidad alguno.
En base a los testimonios y medidas de investigación se libró la orden de detención de los diez agentes que firmaron el acta de procedimiento. La audiencia imputativa está prevista para el jueves y será –en principio- por falsificación de instrumento público e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
