Promediando un fin de semana largo complicado por las bajas temperaturas en Rosario, el Hospital de Niños Víctor J. Vilela se convirtió este domingo en escenario de una tarde agobiante para familias que sufrieron demoras de varias horas por la altísima demanda en medio de la ola de frío.
La guardia del centro de salud ubicado en Italia y Rueda fue escenario de múltiples quejas en el transcurso de la tarde ante la falta de atención para chicos afiebrados y con otros síntomas. El crecimiento en la cantidad de usuarios del sistema de salud público municipal por el impacto de la crisis económica quedó manifiesto y hubo padres decidieron irse a otros efectores ante la desesperación para acceder a la consulta con un médico.
"Hay gente que está desde las 2 y todavía no fue atendida", se quejó una de las personas que esperaba ser atendida a última hora de la tarde. Una de las cuestiones más llamativas en ese contexto fue la decisión de colocar afiches que advertían a los padres: "Faltan consultorios y camillas para la atención de pacientes".
El pedido de disculpas y la firma del Sindicato de Municipales daba a entender que la notificación no fue una medida adoptada por las autoridades del Vilela. Si bien hubo quienes buscaron otras alternativas, otras familias se armaron de paciencia en la guardia hasta que llegara su turno y le hicieron frente al cansancio y la baja temperatura.