Los anuncios del Ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta sobre el inicio de las clases presenciales en este 2021 llegaron a la provincia del Chaco. El Gobernador Jorge Capitanich se refirió a la cuestión y aseguró que aspira a lograr que haya clases presenciales este año.
Con la campaña de vacunación contra el COVID-19 avanzando y la llegada un segundo lote de vacunas Sputnik V desde Rusia, los sindicatos docentes advierten que la presencialidad escolar será difícil si los docentes no están inmunizados.
Trotta reiteró ayer que “la presencialidad es el horizonte” que tiene el Gobierno para lograr el regreso a las aulas, aunque explicó que debe haber una “realidad epidemiológica de base que lo permita”. Es decir, un comienzo de clases en modo presencial, limitado, en combinación con la virtualidad, al menos hasta que la pandemia ofrezca una tregua.
Para habilitar el inicio de clases presenciales en 2021, el Ministro de Educación de la Nación se basó en lo decidido por los ministros provinciales en la última asamblea del Consejo Federal de Educación; donde se aprobó el protocolo marco y los lineamientos federales para la reanudación de las clases presenciales.
En este marco, el próximo 20 de enero, Jorge Capitanich encabezará un nuevo encuentro del Consejo Regional del Norte Grande. “Los gobernadores tendremos el encuentro del Consejo Regional del Norte Grande en Chilecito, donde estaremos también con el Presidente y parte de su gabinete, con quienes también abordaremos las cuestiones educativas”, dijo el mandatario de Chaco.
“Nosotros aspiramos a avanzar al máximo con la presencialidad, si se cumplen las premisas, como ser el número de contagios y la disponibilidad de los docentes para aplicarse la vacuna”, advirtió Capitanich.
Vale recordar que la provincia del Chaco cerró el año con clases presenciales en las escuelas rurales de localidades donde no se habían registrado casos de COVID-19. Sin embargo, entre la última semana de diciembre y las primeras semanas de enero del 2021, los contagios se dispararon en la provincia, lo que hace dudar a muchos sobre el reinicio de las clases presenciales.
Por otra parte, la aplicación de las dosis a los docentes, cerca de 1,2 millones de vacunas, es un requisito al que apuntan algunos gremios, incluido el SUTEBA bonaerense de Roberto Baradel. Aunque Trotta ha insistido en estos días en que “no es una condición indispensable”.
La referente provincial de la CTA y de CTERA, Mora Pared, quien también integra el Consejo Provincial de Desescalada, aseguró que “si están dadas las condiciones, se dará la presencialidad en las aulas, por la contención y la alimentación de los chicos”. “Pero si no están dadas las condiciones, no podemos poner en riesgo a alumnos, y docentes aún no se han vacunado”, agregó.
Pared aseguró que para CTERA “la disputa más grande se da en Capital Federal, donde hubo protocolos que fallaron. Hay que encontrar la forma de incluir a todos. Hubo provincias que empezaron las clases presenciales y luego fueron para atrás. No porque el brote se dé en las escuelas sino por la circulación misma del virus”.
“Para entrar al aula primero todos los docentes deberían estar vacunados. Esto (el virus) es letal y habrá que tener cuidados, y habrá las tensiones como toda decisión nacional, pero siempre priorizaremos la salud”, manifestó Pared.
La decisión política de los gobernantes de retomar las clases presenciales en las escuelas parece no encontrar un consenso con la postura de los gremios de exigir protocolos y vacunación para los docentes.