En medio de un vuelo desde Capital Federal hacia Puerto Madryn, el piloto del avión se tomó un momento para homenajear a dos pasajeros: unos excombatientes de Malvinas. El reconocimiento llevó a que recibieran aplausos y haya lágrimas de emoción.
El 2 de abril de 1982 es un punto de quiebre para la historia de Argentina. Con el comienzo de la guerra, miles de soldados fueron enviados a luchar incluso sin demasiada experiencia. A 40 años de aquella fecha, la sociedad se ve muy movilizada por las historias detrás de esos meses en conflicto.
Guillermo Huircapán, veterano de Malvinas, compartió en sus redes sociales el video en que dos excombatientes son homenajeados en pleno vuelo hacia la ciudad chubutense. Ambos pasajeros que lucharon por su patria volvieron a su continente el 19 de junio y arribaron en Puerto Madryn, siendo testigos de “El día que Madryn se quedó sin pan”.
“El 19 de junio es una fecha que para muchos de ustedes no tendrá ningún significado especial, pero si para dos de nuestros pasajeros, que son Jorge Podesta y Patricio Luzzo, queridos veteranos excombatientes de Malvinas”, comenzó relatando el capitán.
Los tripulantes en seguida inundaron el avión de aplausos y varias personas registraron el momento. Podesta y Luzzo no pudieron contener las lágrimas y agradecieron el reconocimiento.
Pero no terminó ahí, pues el piloto contó que los veteranos llegaron a Argentina en el buque británico Canberra cuando finalizó la Guerra. El destino de los prisioneros argentinos en ese momento era incierto: no sabían si los llevarían a Montevideo o a Gran Bretaña.
Finalmente, alrededor de las seis de la mañana del 19 de junio de 1982, más de 4000 soldados desembarcaron en Puerto Nuevo, en la localidad chubutense, entre ellos los tripulantes mencionados.
Homenajearon a dos veteranos de Malvinas que atestiguaron “El día que Madryn quedó sin pan”
Aquel día de su regreso se lo conoció como “El día que Madryn quedó sin pan”, pues cuando los vecinos del lugar se enteraron que los combatientes volvieron, vaciaron las panaderías y les dieron la bienvenida con los brazos abiertos y todo el pan que había.
Con dificultades, los héroes pudieron recibir palabras de aliento, abrazos, besos y cariño, luego de tantos meses de ver la muerte frente a sus ojos. Fue complicado, pues un cercado les impedía acercarse demasiado al resto de las personas.
Puerto Madryn fue la primera ciudad en recibir a los sobrevivientes de la Guerra de Malvinas. 40 años después de aquella vez, Podesta y Luzzo regresaron a la ciudad para conmemorar esa fecha que los marcó de por vida.
Las felicitaciones y reconocimientos en el avión los llenaron de emoción. El piloto entonces finalizó su homenaje pidiendo que siempre se mantenga vivo el recuerdo de los soldados y su pelea en Malvinas.