La Sociedad Rural de Rafaela dejó sentada su postura, luego de lo ocurrido esta semana en la Cámara de Diputados de la Nación, en donde después de la votación en positiva de la denominada “Ley Ómnibus”, el bloque oficialista decidió su pase a comisión, dado que no logró retener los votos del viernes al martes. Y el presidente Javier Milei decidió que no volverá a tratarse en el Congreso.
A continuación, transcribimos textualmente el texto enviado a los medios de comunicación:
“En los últimos días se vivió en nuestro país una clarificación de la estructura política que abarca a los poderes del Estado y olvida las necesidades de la población.
Nuevamente los vicios de la vieja política dejaron a un costado al ciudadano argentino, porque más allá de algunos detalles que correspondían ser debatidos aún en el recinto de Diputados, sólo primó el interés de algunos sectores de poder.
En las semanas previas al tratamiento, el sector agropecuario había sabido negociar y gestionar los cambios fundamentales del proyecto original, para no ver afectado el desarrollo del principal sector productivo y económico del país.
Cambios en retenciones, biocombustibles, fueron clave para que las entidades que estamos al lado del productor y que formamos parte de la agroindustria esperemos una aprobación para que a la vez se garanticen servicios esenciales, mejoras en las condiciones de contratación laboral, elusión de bloqueos sindicales, pero sobre todo para que la altísima carga impositiva que seguimos padeciendo empiece a encontrar otra forma de análisis y utilización, a partir de contar el Gobierno con herramientas de base que podrían dar paso a otras medidas hacia adelante.
Para un Gobierno que recién comienza, se esclarece que estas actitudes que incluyen a legisladores por la provincia de Santa Fe, no hacen más que poner en peligro al bienestar de la República Argentina, motivando inquietudes en el humor social.
Pareciera que con la marcha atrás en el tratamiento particular de una Ley que tenía voto positivo en lo general, nuevamente desde la Sociedad Rural de Rafaela vemos que dejamos pasar una gran oportunidad de cambio, que desde esta institución venimos pregonando, no sólo por el bienestar del sector agropecuario, sino del conjunto de la sociedad argentina, siempre con propuestas y con voluntad de trabajo.
Los mercados internacionales y nacionales respondieron rápidamente a la negativa, los dólares tuvieron comportamientos alcistas y confusos que no hacen más que alterar aún más la crisis que se arrastra desde hace años, que no sólo es financiera, sino también social y cultural.
Es una obligación de quienes están en los poderes ejecutivos y legislativos responder a las necesidades de la comunidad, sobre la base de derechos y obligaciones, pero con el objeto de responder a la urgencia de rescatar a un país que fue rico y hoy a pesar de sus recursos, cada vez luce más empobrecido, aunque el campo no afloje y su gente no deje de trabajar.