Naiara Durán, fue asesinada a puñaladas y encontrada dentro de un tacho de aceite de 200 litros a orillas del río Paraná, en la ciudad bonaerense de San Pedro. Este domingo su expareja y padre de uno de los hijos de la joven, junto a su concubina, fueron detenidos acusados de homicidio.
Se trata de Francisco Leonardo Vlaeminck (35) y Daniela Candela Franco (35), quienes tuvieron un allanamiento en su vivienda de la calle Primera Junta al 500, de la citada localidad al noroeste de la provincia de Buenos Aires, por orden de la fiscal de instrucción 7 de San Nicolás, María del Valle Viviani.
Según indicaron las fuentes a Télam, Vlaeminck es expareja y padre de uno de los hijos de Naiara (25), mientras que Franco es la concubina del hombre, con quien compartían el monoambiente que fue allanado.
En tanto, Mario Damián Gil (31), expareja de Naiara y con quien tenía también un hijo, y Antonella Ruso, prima de la víctima, fueron liberados luego de prestar declaración indagatoria en el día de ayer, pero continuarán sometidos a la investigación.
El giro en la causa se estableció luego de las declaraciones de Gil y Ruso, además del análisis de las cámaras de seguridad de la zona, que determinaron que Durán fue en moto hasta el domicilio de Vlaeminck, donde ingresó, pero que no se registró su salida del mismo.
Se determinó que Naiara concurrió al domicilio de Francisco en el horario de las 16 horas del domingo 13 y no salió por ninguna de las arterias, ni por la misma calle que ingresó, ni por las arterias paralelas.
Los voceros indicaron que la Policía Científica vio como llamativo que las paredes del domicilio estaban pintadas recientemente, por lo que se procedió a tomar rastros del lugar y analizarlos a través del luminol.
“Con la prueba de luminol, en una de las habitaciones da positivo de posibles machas hemáticas”, precisó la fuente consultada.
En el lugar también se incautaron tres teléfonos celulares, un punzón, un destornillador y pelos que serán analizados.
Cómo sigue la investigación
Especialistas creen que Durán fue asesinada en el interior de dicha vivienda, su cuerpo colocado en el tacho de 200 litros de aceite y llevada en un vehículo hasta la orilla de un rio del Paraná.
Vlaeminck y Franco serán indagados en las próximas horas por la fiscal Viviani, quien los imputó por el delito de ”homicidio agravado por el vínculo mediante violencia de género”, que prevé una pena de prisión perpetua.
El hallazgo se produjo el jueves a la tarde, cuando efectivos de la Prefectura Naval Argentina (PNA) encontraron el cadáver de la joven envuelto en una lona dentro de un tacho de 200 litros, con signos de haber recibido varias puñaladas.
La víctima se encontraba desaparecida desde el domingo último y su abuela había realizado el miércoles una denuncia de averiguación de paradero ante la policía de San Pedro.
Los efectivos de esa ciudad, con colaboración del personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Nicolás, iniciaron la búsqueda de la joven y, en ese marco, relevaron las cámaras de seguridad de distintos sectores de San Pedro, en base a lo cual se estableció que Naiara había ingresado a una propiedad situada en Dávila al 300 que tiene dos viviendas, una que da al frente, donde reside Gil, su exnovio, y otra que está en el fondo, habitada por Ruso, la prima de la víctima, de 26 años.
Por tal motivo, la fiscal Viviani solicitó un allanamiento en esos domicilios, donde se secuestraron dos teléfonos celulares, entre ellos el de Naiara, aunque no halló rastros de la joven.
Los médicos forenses que observaron el cuerpo de la mujer detectaron a simple vista que presentaba lesiones punzo cortantes en el rostro y el cuello.
El resultado preliminar de la autopsia determinó que la víctima sufrió siete puñaladas y que una vez fallecida le quebraron una muñeca.
En tanto, el viernes se realizó una movilización en el centro de San Pedro hasta la sede judicial para pedir justicia por Naiara con la consigna “terminar con el machismo”.