Rastros de sangre y ADN comprometen al acusado del femicidio de la preceptora en Posadas

Las pruebas forenses confirmaron la presencia de manchas de sangre en la vivienda y coincidencia genética entre el ADN de la víctima y su pareja, Gustavo Cardozo, detenido por el crimen.

Rastros de sangre y ADN comprometen al acusado del femicidio de la preceptora en Posadas
Rastros de sangre y ADN comprometen al acusado del femicidio de la preceptora en Posadas.

Las investigaciones en torno a la muerte de Soledad Machuca, la preceptora de 34 años hallada sin vida el pasado martes 25 de febrero en su vivienda del barrio Nosiglia, en Posadas, arrojaron resultados clave en las últimas horas. Según confirmaron fuentes judiciales, los análisis de luminol realizados en el lugar del hecho detectaron rastros de sangre en la habitación donde fue encontrada la víctima, así como en un trapo de piso.

Además, las muestras de ADN extraídas del cuerpo de Machuca coincidieron con el perfil genético de su pareja, Gustavo Cardozo, un ex suboficial de la Policía de Misiones, quien permanece detenido en el marco de la causa.

La autopsia, ordenada por el juez de instrucción Fernando Verón, reveló que la causa del deceso fue un traumatismo de cráneo. Machuca se desempeñaba como preceptora en el Centro Educativo Polimodal (CEP) N.º 36 y su muerte provocó una profunda conmoción en la comunidad educativa.

Los peritajes estuvieron a cargo de la División Criminalística de la Policía de Misiones, que realizó pruebas de luminol —una técnica bioquímica utilizada para detectar rastros hemáticos— y tomas de hisopado para análisis genéticos. Ambos estudios resultaron positivos y refuerzan la hipótesis de un hecho violento vinculado al entorno íntimo de la víctima.