Tras la primera derrota política que expuso los riesgos de su acotado margen de acción en el Congreso, el presidente Javier Milei salió a promover un acuerdo con el PRO de Mauricio Macri y hasta puso a disposición lugares en su gobierno.
“Se viene un nuevo rediseño político, lo que se viene es una coalición entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA). La idea es la que tiene que regir y no las estructuras políticas. Estamos caminando juntos”, adelantó Patricia Bullrich, la ministra de Seguridad.
La ex titular del PRO y ex candidata presidencial de Juntos por el Cambio blanqueó las gestiones tras los días de furia que protagonizó Milei, en los que acusó a los gobernadores y a otros representantes de la denominada oposición dialoguista por la caída de su proyecto de Ley Bases en laCámara de Diputados. En rigor, el propio Presidente ordenó que el texto (que ya tenía aprobación en general) vuelva al tratamiento en comisiones ante las dificultades para que se aprueben los artículos clave como el referido a la delegación de facultades.
Seguido, Milei se ocupó de dinamitar la buena sintonía que mantenía con algunos gobernadores del radicalismo. En ese contexto, y obligado a ampliar su pata política, el Jefe de Estado liberal habilitó el acercamiento a la estructura que conduce Macri, quien trabaja para quedarse nuevamente con la conducción del partido que fundó y lo llevó a la Presidencia. La elección se realizará el próximo 17 de marzo, pero Macri ya jugó con comunicados que difundieron líderes y dirigentes de 20 provincias para pedir su regreso a la conducción.
“Yo empujo para ese lado, sin duda, para que la idea no se frustre de nuevo en la Argentina, que el cambio no se frustre de nuevo. No podemos darnos el lujo de que, otra vez, el cambio se frustre por los intereses que te traban ese cambio”, justificó Bullrich en declaraciones a la prensa.
La ministra habló con la bendición de Milei, quien continúa con su gira por el extranjero y se prepara para la cumbre con el papa Francisco.
Bullrich incluso reconoció que las discusiones contemplan incorporaciones en el gobierno nacional. “Hay muchos nombramientos que faltan”, dijo, también en medio de los rumores de más cambios en el Gabinete, que tomaron fuerza con las críticas de Milei contra los “traidores” que integran sus filas.
“No pueden ser oposición y oficialismo al mismo tiempo”, dijo Bullrich. Luego, agregó que es necesario “avanzar territorialmente sobre espacios que están dominados por gente que intentan destruir al gobierno desde dentro”.
Ante esa situación, la ex candidata presidencial destacó que en el PRO se “alinearon todos y del primero al último votaron a favor de la ley”.
El propio jefe del bloque del PRO en la Cámara de Diputados, Cristian Ritondo, se encargó el mismo martes, cuando se cayó la ley, de difundir un comunicado para destacar que los “diputados y los gobernadores del PRO trabajaron incansablemente para lograr que este gobierno tenga las herramientas que necesita para gobernar y llevar adelante el cambio”.
“El Gobierno hoy tiene que alinearse políticamente. Esto no es un tema de amigos. Es un tema de que toda la gente tiene que defender una causa y jugarse por la causa”, apuntó Bullrich.
En la Casa Rosada moderaron las expectativas.El vocero presidencial Manuel Adorni, al ser consultado sobre el eventual pacto con el PRO, se limitó a señalar: “Que yo sepa Bullrich, (Luis) Petri y dirigentes de otras fuerzas políticas son parte del Gobierno”.
“El Presidente elige a los que considera mejor para cada puesto”, completó el funcionario.
Luego, cuando le preguntaron sobre posibles cambios en el Gabinete, indicó que le “todavía no hay ninguna novedad al respecto”.
“No hay ningún cambio que pueda informar. Todo cambio de Gabinete va a ser por cuestiones de gestión y no políticas. Ocurran hoy o dentro de dos años”, insistió.
Milei y Macri siempre mantuvieron una buena relación, que incluso le generó al ex presidente tensiones con sus socios de la coalición Juntos por el Cambio durante la pasada carrera presidencial.
De cualquier manera, el ex también jefe de gobierno porteño no ocultó su entusiasmo con la postulación de Milei y hasta aprovechó apariciones públicas para pedirle a los militantes de JPC que se comprometan a acompañarlo.
Macri reforzó esos contactos tras la victoria electoral de Milei, pero la relación se enfrió durante las negociaciones para armar el Gabinete, en las que el liberal optó por cerrar acuerdos individuales, entre ellos, el que incorporó a Bullrich y al radical Petri, ex candidato a vicepresidente de JPC.
El nuevo armado al que apela el gobierno nacional vuelve a poner a prueba a la estructura de JPC. Milei no disimula sus extremas diferencias con los radicales y, sobre todo, con el presidente del partido, el senador Martín Lousteau.
Es una avanzada que podría terminar de separar las aguas entre los halcones y las palomas de JPC, que tantos contrastes expusieron durante la pelea presidencial.