La pulseada entre el albertismo y el kirchnerismo sobre la conveniencia o no de suspender las PASO empezó a inclinarse para el lado del presidente Alberto Fernández, situado entre quienes no quieren cambios en el cronograma electoral 2023.
Si bien los gobernadores oficialistas también están a favor de suspender las primarias, se asume por estas horas que en el Congreso no están dadas las condiciones para impulsar una reforma electoral: los plazos urgen (30 de noviembre terminan las sesiones ordinarias) y el quórum de 129 diputados para tratar la suspensión suena a imposible. Otros admiten sobre la “incomodidad” de priorizar este debate público frente a urgencias como la inflación y los salarios caídos; están, además, los que no quieren quedar en el medio “del fuego cruzado” entre las partes en pugna del Frente de Todos.
“El Gobierno sostiene que hay una ley vigente, que es una buena ley que convoca a las PASO y que ya está en marcha”, dijo ayer Gabriela Cerruti, poniéndole voz al presidente Fernández. También sostuvo que implicaban “más democracia y más participación”.
“Es un tema que debe definir el Congreso y creo que hay otros temas prioritarios en la agenda”, dijo Cerruti. “Renta inesperada”, ejemplificó.
Un funcionario albertista, en charla con este medio, precisó los dichos de la portavoz presidencial: “El 30 de noviembre termina el período ordinario de sesiones. No queda tiempo para tratar un proyecto de suspensión de las PASO. El Ejecutivo no va a a presentar un proyecto en una eventual agenda de extraordinarias”.
En Casa Rosada comentan que hay sectores aliados al Presidente Fernández que quieren mantener las PASO. “Sea con Alberto como candidato o con otro”, agregan. Esta posición sostiene el grueso de la CGT, con Héctor Daer a la cabeza, y los movimientos sociales. El Movimiento Evita ya anunció su disposición a competir con La Cámpora en algunos municipios bonaerenses.
El ministro del Interior y dirigente de La Cámpora, Wado de Pedro, fue quien blanqueó que “el cien por cien de los gobernadores” estaban de acuerdo con suspender las PASO nacionales y quedó como vocero del grupo. El diputado Máximo Kirchner ya había dicho que le resultaba “extraño” que un oficialismo fuese a las PASO presidenciales.
Finalmente todas las especulaciones quedan vagas frente a la imposibilidad de reunir el quórum de 129 votos. Los socios de la coalición Juntos prefieren canalizar la anticipada y dura disputa por las candidaturas, ya en marcha, por medio de las PASO. El libertario Javier Milei, gran detractor de las primarias por considerarla un gasto excéntrico del Estado, avisó que no dará quórum. Los bloques provinciales ya no expresan el entusiasmo por suspender las PASO de hace unas semanas atrás.
Otra señal surgió ayer desde el Congreso: los diputados del Frente de Todos por la provincia de La Rioja que iban a presentar un proyecto propio para eliminar las primarias con auspicio del gobernador Ricardo Quintela, dieron marcha atrás. Hace solo una semana, los legisladores riojanos anunciaban la presentación del proyecto, que en medio de las diferencias internas decidieron frenar.
“Decidimos no presentarlo. Lo hablamos mucho en la provincia y creemos que no están dadas las condiciones”, confirmaron fuentes legislativas riojanas. Un día antes, el también diputado Leandro Santoro, había calificado de “error estratégico y ético” suspender las Paso. Radical disidente, Santoro quiere el próximo año disputar las PASO en CABA.
Desde La Cámpora se frenaron ayer los on y los off al respecto. “No queremos seguir debatiendo sobre eso”, respondió a este medio un dirigente cercano a Máximo Kirchner.
Del otro lado del edificio del Congreso, tampoco parece haber ánimos de persistir en la suspensión de las PASO. “No es un tema que quiera hablar en estos momentos; no es un tema sobre el que tenga opinión formada”, respondió el senador Oscar Parrilli, ante la prensa parlamentaria. No dejó lugar a ninguna repregunta.
Acortar plazos entre las PASO y la generales, y la posibilidad de integrar formulas entre ganadores y perdedores de las PASO, fueron propuestas de reformas. “Eso lo tiene que discutir el Congreso y ahora otra agenda”, dijo la ministra Victoria Tolosa Paz.