Mauricio Macri brindó una entrevista a Joaquín Morales Solá, en el programa “Desde el Llano”. En ese marco, se refirió duramente al Gobierno: habló de populismo, de mafias y de “falta de coraje”. Asimismo, ironizó con que si “Perón viviera, se afiliaría a Juntos por el Cambio”.
Tambien apuntó a la actual gestión señalando que “defienden a los que no trabajan”. “Necesitamos un país en el que todos nos comprometamos a trabajar la misma cantidad de días y de años, sin robarle el trabajo al de al lado. El general decía que cada uno tenía que producir, como mínimo, lo que uno consume”, subrayó.
En otro orden, habló sobre cómo ve a su coalición otra vez en el Gobierno. Hizo una autocrítica de su gestión y dijo que deberían evaluar “para qué” volver. En cuanto a su posible candidatura, dijo: “Yo no me subí, pero no me gusta que me bajen ni que me pongan en ningún lado”.
Su análisis del Gobierno actual
“Hoy espero reflejar lo que me pasa. Estoy triste, preocupado por lo que estamos viviendo. Por el creciente deterioro de un gobierno que no tiene rumbo, ni plan y se ha dedicado a destruir oportunidades. Argentina está fuera del mapa”, dijo Macri.
Acerca de cómo ve la situación del país, expresó: “La Argentina no puede crecer producto de este entramado mafioso de la política y del empresariado. Hay que establecer reglas de juego claras. Es complejo y el país simplifica todo”. “Necesitamos un gobierno con coraje”, enfatizó.
En cuanto a la “grieta” consideró que no cree que exista “entre personas” sino “entre ideas anacrónicas, destructivas, y las ideas modernas”.
Y también volvió a hacer mención al “populismo” al señalar que “inyecta decepción” y a la “mafia de los sindicatos” asegurando que “nadie invierte en un país en donde existen los Pablo Moyano”. “Si la Argentina no termina con los comportamientos mafiosos no tiene futuro. Hay que dar batalla y después de esa batalla, sale el sol”, señaló.
Dijo, además, que “las ideas de este Gobierno son un desastre” e “inviables” y que “lo único que hizo Massa hasta ahora es patear la pelota para adelante”. “Van rumbo a dejar una bomba peor que la que recibimos en 2015″, aseguró.
Y aseveró: “No hay ningún país que haya retrocedido tanto el PBI como la Argentina en los últimos 50 años”.
Qué dijo sobre la posibilidad de volver a gobernar
“Estoy muy esperanzado como nunca antes. Necesitamos un cambio profundo”, expresó. Sin embargo, de cara a las elecciones de 2023, dijo: “Tenemos que discutir para qué vamos a volver al Gobierno”. “Hoy estoy para debatir ideas. Me siento en ese lugar. Estoy haciendo un mayor aporte que salir a la cancha a decir quiero o no ser candidato”, puntualizó. Y sobre su hipotética candidatura advirtió: “Yo no me subí a la candidatura, no me gusta que me bajen ni que me pongan en ningún lado”.
“Con el apoyo de la gente para ir a fondo con los cambios, si vienen con las piedras vamos a bancar con el casco puesto. Vamos a imponer la ley y la Argentina cambia. Argentina va a entrar en una era de sensatez”, aseguró.
Como en el lanzamiento de su libro, la autocrítica sobre su mandato giro entorno a las expectativas: “Asumí en el tercer subsuelo, llegué al sexto o séptimo piso, pero las expectativas eran altas y fue insuficiente, no pude ganar la reelección. Este Gobierno volvió y se fue del séptimo piso al séptimo subsuelo”.
En cuanto a cómo sería la vuelta al Gobierno de Juntos por el Cambio, indicó: “Va a ser mucho mejor porque capitalizamos la experiencia anterior. Vamos a vivir con la verdad, con un Gobierno trasparente. Y sorprendió al asegurar que “si Perón resucitase hoy, se afiliaría a Juntos por el Cambio porque es el que defiende a los que trabajan”.
“Estamos trabajando con más profundidad que antes en la coalición para volver al Gobierno”, aseguró. Y sumó: “La Argentina decidió abrazarse a ideas modernas, no a las anacrónicas”.