El Gobierno denunció la presencia de un boliche clandestino en un piso que había sido cedido a la Universidad de las Madres con fines educativos. En una conferencia de prensa, el portavoz Manuel Adorni detalló que la Policía Federal llevó a cabo un allanamiento en el inmueble, el cual había sido prestado por el Estado en 2018 para actividades educativas.
En lugar de ser utilizado para la educación, el espacio “estaba lleno de parlantes, luces, telones, barras, botellas de bebidas alcohólicas”, transformándolo en un boliche. Adorni mostró una foto como evidencia, comentando: “Esta es la brutalidad con la que manejaban el barcito que se habían armado. Hasta jugaban a los dardos”.
Además del boliche, en el tercer piso vivía una familia, mientras que en los dos primeros pisos funcionaban organizaciones privadas. Entre ellas se encontraba una sede del partido Movimiento Integración Latinoamericana de Expresión Social (M.I.L.E.S.), “vinculada a uno de los famosos piqueteros o ex piquetero porque ya no cortan más la calle, donde se encontraron banners con la frase ‘vamos a volver’ junto a un imagen de la ex presidente condenada Cristina Kirchner”.
Adorni señaló que en 2023, la Universidad recibió el equivalente a 4.500 millones de pesos, pero “se recibieron 0 alumnos”. El ministro Mariano Cúneo Libarona presentó una denuncia penal por “grave desviación de los fines para los cuales la ABE concedió el espacio” y “falta de respeto a todos los pagadores de impuestos de Argentina”.
Adorni concluyó con un mensaje directo: “A todos los que se divertían con la plata de todos los argentinos... Muchachos, se les terminó la fiesta”.