En medio de las medidas de ajuste propuestas por el gobierno de Javier Milei, se prevé que unos 15.000 contratos estatales no serán renovados tras Semana Santa.
Corresponden a contratos de trabajadores que fueron ampliados en diciembre del año pasado y que vencen a fines de marzo.
Desde la Casa Rosada buscan reducir el 30% del grueso estatal de manera progresiva. Es por ello que, con la liquidación de abril, podrían producirse esta cantidad de cesantías de contratos.
Hay que tener en cuenta que el Ejecutivo ya recibió las bajas de cada ministerio y organismos descentralizados, pero todavía no las quiere informar ni confirmar el número, debido a que “hay decisiones sobre los contratos en movimiento y podría variar según la disposición de cada titular”.
Entretanto, ya se dieron de baja unos 7.000 contratos previo a enero y en distintas áreas, tales como AYSA, Télam, INCAA y ANSES.
Estas próximas bajas de marzo corresponderían a la auditoría que pidió el propio Javier Milei sobre el Estado. Desde el Gobierno le informaron a TN que “se ampliaron contratos en diciembre para poder analizar quién trabajaba y quién no, es en base a eso que se hace el recorte actual”.
El decreto 84/2023 le permite a los titulares de las carteras a no dar de baja a los trabajadores que sean “indispensable para el funcionamiento de la jurisdicción, de manera restrictiva y fundada y que su continuidad es necesaria por razones impostergables de funcionamiento”.
Pero se aclara que “en el caso de que las autoridades decidan renovar dichos contratos, deberán fundar la decisión demostrando la necesidad de continuar con la contratación”.