La inflación alta vino para quedarse y por mucho tiempo. Y en la puerta de un año electoral el Gobierno quiere que los últimos meses del año transiten en paz social. Para eso, está garantizando los fondos suficientes para los planes sociales y todo tipo de ayuda que brinda el Estado.
Aquí es dónde aparece un tema de compleja resolución. ¿Cómo hacer para que los salarios no pierdan frente a la inflación y que la CGT no se ponga en pie de lucha?
El presidente Alberto Fernández, la vicepresidenta Cristina Kirchner y el Ministro de Economía, Sergio Massa, coinciden en que se reabran las paritarias y que cada gremio saque lo que más pueda. El ministerio de Trabajo sabe que debe homologar esos acuerdos y esa garantía dio a los diversos sectores en que está dividido el sindicalismo argentino.
Lo que parece estar estancada, por ahora, es la alternativa de pagar una suma fija a todos los trabajadores públicos y privados. No lo quiere la mayoría de los gremios y no lo quieren los empresarios.
Reapertura de paritarias
Octubre y noviembre son los meses elegidos para la reapertura de las paritarias, aunque en septiembre ya se sentaron alrededor de la mesa algunos sindicatos y cámaras patronales.
En la CGT y en varios despachos oficiales coinciden en pronosticar para todo este año una inflación superior al 90%. Y los gremios que mejor pactaron salarios lo hicieron entre el 65% y el 80%.