El 31 de marzo del año 2009 falleció el expresidente de la Nación, Raúl Ricardo Alfosín, recordado por ser el mandatario que restauró la democracia en nuestro país, tras el último golpe cívico-militar que duró desde 1976 a 1983.
Alfonsín falleció a los 82 años producto de un cáncer de pulmón que lo aquejaba, lo que le generó una merma notable en su salud en el último tiempo de su vida.
La vida y obra de quien regresó la democracia en la Argentina
Reconocido por propios y por opositores como el restaurador de la democracia a inicios de la década del ‘80, Raúl Alfonsín transitó un gobierno tumultuoso durante su gestión, que se vio empañado por la crisis económica que derivó en una hiperinflación al final de su mandato y adelantó su salida, para darle paso a una figura que hacia finales de los ‘80 estaba en pleno ascenso político: Carlos Menem.
Pero volviendo a Alfonsín, nació un 12 de marzo de 1927 en la localidad bonaerense de Chascomús. Se recibió de abogado y ejerció como político casi toda su vida, sosteniendo como uno de sus pilares la defensa de los derechos humanos de los argentinos.
Además de su auge en la política, fue concejal, diputado nacional, senador nacional, hasta llegar a convertirse en presidente de la Nación en 1983.
Se destacó como un dirigente activo de la Unión Cívica Radical (UCR) y fue el último representante de este partido político que accedió a la presidencia.
La gestión de Raúl Alfonsín como presidente
Principalmente enfocada en recuperar el orden constitucional que faltaba por aquellos años en la Argentina, su gestión se centró en los derechos humanos y en restaurar la democracia, tras la recorrida de la Junta Militar al frente del país durante el autodenominado Proceso de Reorganización Nacional que afectó a la Argentina desde 1976 a 1983.
Su paso por el gobierno es reconocido justamente por la realización del Juicio a las Juntas, así como también por el Tratado de paz firmado entre Argentina y Chile por la disputa del canal de Beagle que finalizó en 1984. Además, en 1985, logró acuerdos con Brasil que llevaron a la conformación del Mercosur.
Uno de sus lemas, el cual quiso implementar a rajatabla, fue el de “con la democracia se come, se cura y se educa”, evidenciando una necesidad de época que se hacía palpable por aquellos años.
Deuda externa, el karma de la gestión de Alfonsín
Pese a querer organizar al país, la gestión de Alfonsín no pudo hacerle frente a una situación compleja desde lo económico. Uno de los problemas más notables fue la deuda externa que arrastraba el país y que hizo que la Argentina entrara en default en 1988.
Para 1989, el país atravesaba un proceso hiperinflacionario y una economía estancada que se redujo de un Producto Bruto Interno (PBI) de 103.000 millones de dólares en 1983 a 76.000 millones de dólares en el cierre de su presidencia. Esto mismo, entre otras cuestiones económicas, adelantó su salida e hizo crecer la figura de Carlos Menem quien lo sucedió en el gobierno.
Muerte de Raúl Alfonsín
El 31 de marzo de 2009, el expresidente de la Nación, Raúl Alfonsín, fallecía a causa del mencionado cáncer de pulmón que lo aquejaba.
Se decretaron tres días de duelo en el país y aproximadamente unas 80.000 personas acudieron a la ceremonia de su entierro, que mantuvo el féretro en el Salón Azul del Congreso, para luego trasladarlo al Cementerio de la Recoleta.
Además de las condolencias de diferentes líderes políticos internacionales, también se llegó a celebrar una misa en su memoria en la Ciudad del Vaticano.
De esta manera, el líder radical fallecía, pero su obra como presidente siempre será recordada por tomar el mando en una época en donde la democracia era pedida a gritos por la ciudadanía, en medio de un contexto de suma inestabilidad política y social.