El Hogar Ángeles Custodios de Paraná debió cerrar sus puertas. Por este motivo, 10 niños que estaban alojados allí debieron ser reubicados.
El predio se ubica en la intersección de calles Hernandarias y Ovidio Lagos. Según se informó, un total de 11 personas perdieron su fuente laboral.
Hace algunos meses, trabajadores del lugar habían alertado sobre la posibilidad del cierre, dado que la Congregación de las Hermanas Obreras Catequistas de Jesús Sacramentado, que estaba a cargo del hogar, no renovaría el contrato con el Copnaf -Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia-.
En septiembre, la Congregación emitió un comunicado al respecto de la situación, en el que mencionaron que: “Con el paso de los años, las Hermanas Obreras Catequistas de Jesús Sacramentado hemos ido sufriendo la disminución de vocaciones, realidad que lamentablemente compartimos con la Iglesia toda”.
“Somos conscientes de nuestras limitaciones, pero eso no significa que las personas con las que venimos compartiendo esta misión no puedan asumir la responsabilidad y hacerse cargo de los Ángeles Custodios. Sabemos que sí pueden continuar: ellos lo quieren, los niños también, los vecinos nos han expresado lo mismo, al igual que los socios, la comunidad parroquial y tantas personas que se acercan a diario a la obra”.
El hogar Ángeles Custodios se creó en el año 1938 por una mujer llamada Josefina Bressoue. Estuvo en manos del Estado y de la Iglesia y desde 1970 estuvo a cargo de una comunidad de Hermanas Obreras Catequistas de Jesús Sacramental.