Un descubrimiento histórico se registró en Newen Antung, cerca de San Martín de los Andes: encontraron a una mujer enterrada, 900 años estás, dentro de una canoa. Según las pericias tendría entre 17 y 25 años, habría ocurrido alrededor del año 1142: es el entierro más antiguo en canoa. Por su parte, los arqueólogos estiman que era un método simbólico de ayudar al difunto a viajar al “más allá”.
La mujer fue inhumada en una embarcación llamada “wampo” con una jarra a la altura de la cabeza. Entre 2012 y 2015, dos sujetos fueron encontrados en tumbas cercanas durante las excavaciones, pero solo ella tenía una canoa como “lecho”, es por eso que los investigadores creen que este objeto cumplía la función de “ayudarla a llegar a otro mundo”.
Según informa Minuto Uno, el arqueólogo Alberto Enrique Pérez, de la Universidad Católica de Temuco en Chile, explicó: “Al principio no entendíamos lo que veíamos, ya que era algo desconocido para la Argentina patagónica. Nos sorprendió gratamente”. Afirmaron que no se registró que haya tenido una muerte violenta.
A dónde fueron encontrados los restos de una mujer dentro de una canoa
El cerro Newen Antú se encuentra en la ladera oriental del valle de Lácar, sobre el Cordón Chapaleco, en San Martín de los Andes. En 2013, el hallazgo de varias tumbas en ese sitio generó interés en Neuquén y el resto de la Patagonia argentina por tratarse de una prueba irrefutable de las sangrientas incursiones españolas en el territorio durante el siglo XVI. El entierro de la mujer fue anterior a la llegada de los españoles, estas pruebas podrían servir de testimonio para saber cómo eran las prácticas funerarias de los pobladores originales de la zona.
Aunque la madera de la canoa se pudrió, los investigadores pudieron recuperar alrededor de 600 piezas para analizar. Así se determinó, por ejemplo, que la canoa estaba hecha de madera de cedro de Chile y que una parte estaba carbonizada, señal de que se trataba de una embarcación útil.
¿Entierros en canoa? El significado de “Wampo”
Es una embarcación monóxila usada desde la época prehispánica, el área que corresponde actualmente es al sur de Chile y el suroeste de Argentina, especialmente por los indígenas lafquenches (Mapuches).
Según informa TekCrispy, lo que hacían era colocar al difunto boca arriba en una estructura de madera hecha a partir de un solo tronco de árbol (por dentro ahuecado) el interior con fuego para darle así la forma de piragua o “wampo”.
Los indígenas que prepararon a esta joven querían asegurarse de que su alma tuviera un buen viaje a través de las aguas, y para eso tuvieron que trasladarse a una ubicación agradable al extremo norte de la Patagonia. Luego, la llenaron de presentes.