Luego de que el Senado de la Nación aprobara el proyecto de reforma de los regímenes jubilatorios especiales del Servicio Exterior y el Poder Judicial, la senadora nacional, Lucila Crexell, apoyó el dictamen de minoría presentado por su par, Martín Lousteau, y otros representantes de la oposición.
En su intervención, Crexell fundamentó su voto en la falta de una discusión integral acerca de los problemas estructurales del sistema previsional argentino y afirmó que "nuestro sistema previsional no resiste más parches, medidas de emergencia, ni fugas hacia el futuro. Es impostergable una discusión profunda que nos permita consensuar principios e ideas estratégicas que orienten el sentido de reformas progresivas y graduales, y que coloque en el centro la cobertura universal, la equidad de las prestaciones, la sostenibilidad del financiamiento, y la previsibilidad institucional".
La senadora remarcó "la importancia de no perder de vista los principios básicos de solidaridad, sostenibilidad y equidad, siempre importantes, pero mucho más en tiempos de crisis como el presente". Agregó: "Tenemos un sistema quebrado, que terminó anunciando que no puede financiar la movilidad, que entrega sumas fijas, y que le dice a quienes ganan más de 20.000 pesos que recibirán aumentos cuando se pueda. Ese sistema le garantiza a menos del 5 % de sus integrantes la percepción de haberes superiores a los 200.000 pesos móviles".
Además, se refirió a la importancia de avanzar hacia una reforma estructural que corrija iniquidades y privilegios como paso ineludible hacia un modelo más inclusivo que reconozca el esfuerzo de cada uno de los trabajadores a lo largo de su vida activa. Finalmente, en cuanto a la independencia del Poder Judicial, expresó que "ninguna reforma, por justa que sea debe generar la oportunidad para la colonización del poder judicial ni para garantizar impunidades fuera del debido proceso".