Belén Francese es mendocina por adopción desde hace ya un tiempo y cada vez que puede viaja a la provincia natal de su marido, Fabián Lencinas, y padre de su primer hijo, Vitto. La artista disfruta de pasear por Mendoza, del vino, pero también de las delicias que no se consiguen en otros sitios del país.
Por estos días, Belén Francese está en Mendoza junto a su esposo y por supuesto, el pequeño de 7 meses que llegó a su vida para ponerla “patas arriba” como se dice. Lo que no les impide viajar, y mucho menos hacer varias escapada a la provincia para ver a la familia paterna del niño, sobre todo a su abuela.
Días atrás, la actriz estuvo en el sur de la provincia. Desde San Rafael compartió una foto de espaldas, contemplando el paisaje del departamento mendocino, con sus más de 900 mil seguidores de Instagram.
“Aquí, observando que figura formo la montaña”, escribió al pie de la foto en la que está de espaldas observando la tranquilidad de Valle Grande.
Belén Francese enloquece por las tortitas mendocinas
Pero esta nueva visita de la exvedette no pasó desapercibida. En sus historias mostró que estuvo de paseo por Godoy Cruz y para el desayuno optó por un panificado que únicamente se consigue en Mendoza y por el que los locales y turistas se vuelven locos.
Se trata de las tortitas mendocinas, las que muchos en su paso por Mendoza compran para luego freezar y poder comerlas cuando gusten en sus hogares. Más de un turista compró una o varias docenas para llevar de regalo o para guardar en el freezer, solo basta con consultar en cualquier panadería para confirmar esta tendencia.
Y Belén Francese cayó en la tentación de esta delicia que va muy bien con mate, café, café con leche, té o lo que gustes. Aunque la actriz se lamentó de poder disfrutarlas solo cuando viene a Mendoza y no puede hacerlo en Buenos Aires, donde viven con su familia.
“Por qué no hay tortitas en Buenos Aires”, escribió Belén sobre la foto de una torta raspada a la que le sumó el emoji de risa y de carita con corazones.
Lo que se preguntó la artista lo hacen muchos de los que vienen de visita y las prueban por primera vez. Pero también lo sufren los mendocinos que deben dejar la provincia, la mayoría “mataría” por una tortita en su desayuno o merienda, lo que sin dudas los transportaría directamente a Mendoza.
Al parecer a Belén Francese le encantó la tortita raspada, la vedette de las panaderías de la provincia. Pero para aquellos que no saben, también se consiguen otras dos variedades como la pinchada y la de hoja.