Luego de una denuncia presentada por la víctima, un nuevo caso de abuso sexual en Mendoza está centrado la tención de la Justicia debido a la gravedad de los hechos.
El caso involucra a un empleado de Anses, quien está acusado de haber abusado, desde los 4 años hasta los 17 años, a un medio hermano por parte de madre, aunque la investigación también abarca, abusos a un primo y a un supuesto hijo de una relación en el exterior del país.
La víctima de 25 años confirmó las agresiones sexuales y detalló que fueron desde el 2000 hasta 2014, cuando el denunciante tenía entre 4 y 17 años. El agresor habría cometido los abusos cunado convivía con la familia y que se perpetraron durante años.
A lo largo del testimonio de la víctima, las agresiones también continuaron en la casa de una tía y en otras oportunidades cuando se iban de vacaciones a la Costa Atlántica. Y confirmó que las vejaciones se reiteraron con violencia y bajo amenazas.
La fiscal de Delitos Sexuales, Virginia Rumbo, inició la investigación que derivó en la detención del sospechoso y fue imputado por: abuso sexual simple, con acceso carnal, gravemente ultrajante y promoción a la corrupción de menores; todo agravado por el vínculo la relación y por la convivencia con la víctima. Arriesga una condena de 10 a 50 años de cárcel.
Al expediente se le suma el testimonio de un primo, quien habría sufrido abusos sexuales por parte del agresor en el caso anterior, desprendiendo de esta forma una nueva investigación sobre otros presuntos delitos.