El 4 de septiembre de este año se cumplieron 6 años de la desaparición de Johana Chacón en Lavalle, Mendoza. El único imputado por el caso es Mariano Luque, ex cuñado de la chica que fue vista por última vez cuando tenía 13 años. En las últimas horas aparecieron dos nuevas pruebas que fueron incorporadas al juicio, una que lo favorece y otra que lo compromete aún más, informa Diario Uno.
Luis Curallanca, padrastro del acusado, dijo este lunes que Beatriz Chacón (hermana de la desaparecida y ex pareja del imputado) le había confesado haber mentido en su declaración. Esta mujer había dicho que vio a Luque asesinar y enterrar a su hermana. Esto fue lo que llevó al hombre al banquillo de los acusados. Sin embargo, sus palabras siempre estuvieron cubiertas por un manto de duda ya que estas declaraciones las hizo varios años después de la desaparición y cuando ya no estaba en pareja con Luque. En sus primeras declaraciones había negado rotundamente que su novio tuviera algo que ver.
Curallanca dijo: "Beti me llamó en el mes de julio para que habláramos y como yo no sabía con qué intenciones venía, decidí grabar la charla con el teléfono sin que ella supiera. Fue en la casa de Martín, el otro hermano de Johana, y allí ella se desdijo de toda la acusación contra mi hijo. Me dijo que en la fiscalía no la dejaron expresarse ni contar la verdad y que directamente le trajeron un papel con la declaración ya escrita y se la hicieron firmar".
"Yo le pedí -continuó Curallanca- que lo dijera ante un escribano pero ella se negó, por eso estoy ahora con la grabación aquí para entregarla y que escuchen cuál es la verdad". Este material fue incorporado a la causa.
Otro aporte fundamental fue el de Silvia Minolli, ex directora de la escuela de Johana, que declaró luego de Curallanca. La mujer dijo: "Me llamó hace tres días un señor de Tres de Mayo, quien me dijo que cinco días después de la desaparición de Johana vio a Mariano Luque con el tractor y herramientas agrícolas haciendo un pozo a un kilómetro y medio de la finca donde vivía Johana". Esto también se investigará.
El caso
Johana Chacón fue vista por última vez el 4 de septiembre del 2012 luego de que cruzara la tranquera de la finca en la que vivía en Lavalle. El transporte escolar la dejó en la puerta, ella ingresó y el chofer se fue. Desde entonces no se sabe dónde está.
La finca en Tres de Mayo era administrada por Luis Curallanca. Vivía allí con su mujer y su hijastro Mariano Luque y también con los cinco hermanos Chacón, que se los había llevado porque el padre, Bernardo Chacón (antiguo amigo de Curallanca) porque "no tenía para darles de comer".
En la misma finca, diez meses antes de la desaparición de Johana, también desapareció Soledad Olivera, el 18 de noviembre de 2011. La última vez que se la vio iba caminando a esa finca a ver a Luque, con quien tenía una relación sentimental.
También conocía a Luis Curallanca, quien ayer dijo en el juicio que varias veces le había prestado plata, y era amiga de Beatriz Chacón.