El arzobispo de La Plata e instructor de la causa, Alberto Bochatey, aseguró que los abusos que se realizaron en el lugar "será una mancha negra que nunca nos sacaremos", y remarcó que se realizó la venta de las instalaciones del Próvolo a la municipalidad de Luján de Cuyo "Porque estamos en bancarrota".
A pesar de que las denuncias por abusos sexuales están en manos de la Justicia y que ahora la Municipalidad se encargará del predio, Bochatey admitió en diálogo con LVDiez que el recuerdo de lo ocurrido tendrá un impacto permanente en la influencia del catolicismo. "Del Próvolo se va a hablar de acá hasta la muerte. Mendoza no lo va a perdonar nunca a esto", sentenció.
Ese fue uno de los motivos, de acuerdo con el religioso, por los que la propiedad se vendió por menos del valor que realmente posee. "¿Cuántos clientes me puede conseguir para que compraran el Próvolo?", señaló. Y agregó: "Vendimos lo más caro que pudimos porque sabemos lo que se nos viene".
También deslizó frases como: "Esto es para que la gente sepa que no todo lo que sale en los medios es la verdad. Algunos ponen una parte y otros ponen la otra. Me sorprendió la parcialidad y la mala intención de los medios".
En relación a la votación del Concejo Deliberante de Luján de Cuyo, remarcó: "Los ediles aprobaron con inmensa mayoría la compra. De ocho solamente dos votaron en contra, o sea que no hubo debate negativo de los ediles".
Sobre el futuro: "Lo que necesitamos es salvaguardar el capital y saldar las inmensas deudas que ya tenemos" y remató: "Esto iba a una bancarrota, saben que se hace una convocatoria y cobra Magoya en el año quinceano. ¿Cuánta gente consigue usted para que compren el Próvolo? No es que se venda una casita o un lote para hacer un emprendimiento inmobiliario. Son 9 mil metros cubiertos de muy buena calidad de construcción, que se estaban deteriorando notablemente".
"Quedaron 51 familias sin trabajo y la Asociación Obra San José está siendo frente, poco a poco, para poder pagar las indemnizaciones".
Mientras que sobre el juicio, adelantó: "Nos quedan muchas indemnizaciones, el juicio todavía no ha comenzado. La querella lo sigue postergando: primero quería un juicio por separado, después que el juicio se hiciera todo junto. Lo ha atrasado y todavía estamos sin juicio. Entonces teníamos que tomar la determinación porque nos íbamos a quedar en la calle y sin el bien. Iban llegando embargos, iban llegando deudas".
"Estamos destruidos y lo que queremos es que se haga un buen juicio y que salga la verdad. Que se condene a los responsables, se pueda pedir disculpas a los que hayan sufrido y que se aclare el panorama".
"Lo contaron las víctimas y esperemos que sea todo verdad, porque muchas personas que eran víctimas ya el fiscal las eliminó porque no eran verdad".
Fuente: El Sol - Radio LV10
