La Unidad Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual, que interviene en el caso del abuso a una niña de 4 años del Instituto Leonardo Murialdo, imputó al único detenido "por el delito de abuso sexual agravado por acceso carnal y por la calidad de guardador".
El ahora imputado es un trabajador de la institución que cumplía tareas como celador. Por ahora no trascendió su nombre para evitar complicaciones en el proceso de investigación.
Según trascendió, las cámaras de seguridad y el relato de la pequeña serían los elementos que tuvo en cuenta Cecilia Bignert, fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual.
El jueves por la noche, una familia denunció que su hija de cuatro años había sido abusada en el jardín de infantes del colegio. En horas de la noche, al acostarla, se percataron de que la niña no llevaba su bombacha y la pequeña dijo que un hombre la había tocado y su señorita se había quedado la ropa interior.