La mujer, de 21 años de edad, denunció la situación en Guaymallén, departamento del que es oriunda y al que escapó, luego de abandonar la casa en la que vivió durante unos tres años con su pareja, su suegra y su cuñada, que fueron aprehendidos por la policía tras la acusación.
Según consta en la denuncia, que incialmente fue tramitada en la Fiscalía de San Martín, la joven habría sido víctima de maltratos y sometimientos, al punto que sostuvo en su declaración que en muchas oportunidades pasaba parte del día atada y que la soltaban para hacer la limpieza o darle de comer a su hijo de un año.