Fue encontrado por el padre de una alumna de 17 años en una cabaña de El Carrizal, en la que estaba ella y otras cuatro compañeras en día y horario de clases. Todos estaban en traje de baño y el papá de la chica lo sacó del "cogote" del lugar y llamó a la Policía.
El docente se llama Marcelo Merenda, de 42 años, y es el director de la escuela Florencio Molina Campos, ubicada en el barrio Ujemvi. Las chicas en cuestión son alumnas del establecimiento, van a quinto año: una tiene 17 años y las otras 18 o más.
Las chicas alquilaron una cabaña en El Carrizal y se fueron a pasar una semana. El martes, el padre de una de ellas se enteró que estaba el director, Marenda, también en la cabaña. Se preocupó y se fue de inmediato al lugar. Al llegar encontró una escena irregular y sospechosa para él, que lo obligó a ponerle fin.
"Lo agarré del cogote y me lo llevé, creo que interrumpí lo que iba o podría pasar. Llamé a la Policía y ellos actuaron muy bien pero me dijeron que no me querían tomar la denuncia judicial", comenzó el relato el padre de la chica de 17 años.
El papá de la alumna fue luego al colegio, planteó la situación y luego realizó la denuncia en la Supervisión. "Me extraña que siga en la escuela", reconoció el hombre.
"Las chicas tendrán que declarar qué pasó, pero supimos que ellas habían ido hace unas semanas, los sábados, a pintar la escuela y que el director les pagó $300 a cada una", precisó la directora de Educación Secundaria, Sara Lucero.
Ante esta situación, la directora de Secundaria sostuvo que Marcelo Merenda deberá explicar de dónde salió ese dinero y por qué les pagó, cuál fue el fundamento para abonarles ese dinero por esa tarea.
Pero, además, la directora de Secundaria fue más allá: "el director estaba en El Carrizal en un horario en que debía estar en la escuela".