Todo comenzó en la playa de estacionamiento del shopping de San Juan cuando alguien escuchó el llanto de la pequeña, que estaba en su silla en el interior de la 4x4. Al llegar al lugar y verla sola esperó a que aparecieran los padres, pero al ver que esto no ocurría fue a buscar a seguridad. De a poco, y ante el llanto desesperado de la nena, los que se daban cuenta se acercaban hasta la camioneta para saber qué estaba pasando.
Más grande fue el enojo cuando, según contaron testigos, 30 minutos después Seguridad pudo dar con la pareja, que se encontraba en la zona del cine. Para ese momento había varias personas cerca del auto preocupadas por la niña, y al ver a los padres acompañados por la policía, los insultaron.