Suspendido de un arnés a metros del suelo en una caverna en Noruega, el fotógrafo mendocino Bernardo Giménez logró la ecuación mágica de su profesión: estar en el lugar preciso en el momento justo. El sitio fue la cueva de Hanshelleren -nueva meca de la escalada deportiva- y la ocasión fue cuando el escalador checo Adam Ondra superó el tramo decisivo del "risco más difícil del mundo" y marcó un hito histórico en su actividad. Así lo refleja Diario Los Andes.
Giménez nació en Mendoza hace 49 años. De acuerdo a su sitio web (www.bernardogimenez.com), "su trabajo está enfocado a los deportes al aire libre, estilo de vida y montañas. Ha tenido el placer de trabajar con algunos de los mejores atletas del mundo y ha fotografiado y filmado algunos momentos históricos y primeras ascensiones".
Obtuvo, además, el primer premio en el "Memorial María Luisa", uno de los más importantes concursos de fotografía en Europa, y el Primer premio en el "Concurso de fotografía de montaña" de editorial Desnivel. (Madrid, España).
Sus fotos han sido seleccionadas como finalistas para el Red Bull illume 2013, un libro que recoge la mejor fotografía de acción en el mundo.