Dos jóvenes murieron al ser embestidos por un automóvil cuando cruzaban el Acceso Sur, en Godoy Cruz. El conductor, que terminó con la vida de ambos jóvenes, manejaba alcoholizado y a más de 100 km/h.
Gisella Carrión (25 años), y Rodrigo Armando Fernández (30), tenían tres niños a su cuidado, y cuando fueron en busca de un abrigo térmico a lo de su abuela, pasó lo peor. Aunque, el dolor continúa, teniendo en cuenta que Gisella ya había perdido a un hermano Lucas, en las mismas circunstancias hace tan solo un mes, frente al Barrio La Gloria de Godoy Cruz.
"Pedimos que se haga justicia, porque en un mes hemos tenido dos pérdidas muy grandes en la familia, y han quedado hijos solos", dijo Delia, tía de Gisella, en diálogo con Radio Nihuil.
"Ellos venían de la casa de su abuela, cruzando el Acceso. No vieron ellos que venía el auto, porque venía a una velocidad no adecuada, y más en cuarentena, no tenía por qué estar conduciendo esa persona. Y si bien ellos tampoco debían estar en la calle, era él el que tenía alcohol en sangre. Ellos fueron a buscar unos remedios a lo de su abuela para unos de sus hijos que tenían temperatura", detalló la mujer.
La fiscal Liliana Giner oficializó la imputación contra el joven de 19 años que atropelló y mató a una pareja en el Acceso Sur, cerca de la medianoche del domingo.
La acusación cayó sobre Francisco Zárate (19), quien a partir de ahora está imputado por "doble homicidio culposo doblemente agravado por el número de víctimas y por manejar en estado de alcoholemia". Así arriesga una pena de 3 a 6 años de cárcel.