Dos adolescentes detenidos por un homicidio en Las Heras

Los jovenes tienen 16 y 17 años están apuntados por el asesianto de Cristian Leyton el 7 de febrero.

Policía Mendoza, detenido genérico
Policía Mendoza, detenido genérico

Dos adolescentes de 16 y 17 años fueron detenidos por el asesinato de Cristian Leyton (23) dos semanas atrás en Las Heras, cuando la víctima iba a trabajar.

Durante el jueves personal de la Unidad Investigativa de Las Heras realizó cinco allanamientos en los barrios La Arboleda, Colombia y Centorbi hasta que dieron con los menores.

El primero en caer fue el joven de 17 años, que en pocos días más alcanzará la mayoría de edad, en una casa en la manzana "A" del barrio La Arboleda. En el procedimiento la policía secuestró un celular Samsung J2.

Luego, en calle Catitas Serranas del barrio Centorbi los uniformados encontraron un cuchillo de cocina de unos 30 centímetros que será peritado para saber si es el que se usó para atacar a Leyton. Y muy cerca de ahí, el personal policial detuvo al segundo implicado en la causa, un menor de 16 años.

Leyton fue asesinado el 7 de febrero a la mañana cuando salió de su casa en el barrio Centorbi para tomar el colectivo e ir a trabajar.

Cerca de las 9, vecinos de la zona habían llamado al 911 para denunciar a un grupo de personas que estaban ebriros y alterando el orden.

Cuando llegó un móvil a la zona, encontraron a Leyton en el piso con una herida de arma blanca.

El joven fue trasladado al hospital Central y falleció horasa más tarde.

Tras la llegada de personal de Homicidios, algunos testigos aportaron datos sobre la víctima y sobre los presuntos agresores que ayer fueron detenidos.

Los dos jóvenes fueron identificados y luego puestos a disposición de la Segunda Fiscalía Penal de Menores, a cargo de Liliana Curri. De esta forma, se les aplicará el Régimen Penal de Menores: continuará adelante la investigación mientras permanecen bajo la tutela de la Dirección de Responsabilidad Penal Juvenil (ex COSE).

Tras cumplir los 18 años podrían ser sometidos a juicio por un juez de menores y, de ser encontrados culpables, recibir una pena por homicidio simple, tal vez menor a la que podría recibir un adulto en las mismas condiciones.