Este lunes arrancó el séptimo juicio por jurado en la provincia. Frente al jurado popular están la madre y el padrastro de Giuliano Ybáñez, un niño de 2 años y 9 meses de edad que llegó sin vida al hospital Notti en noviembre de 2017, tras haber recibido una brutal golpiza.
Maximiliano Ortiz Rosales (29), padrastro de Giuliano, y Yamila Ibáñez Benavidez (26), su mamá, están acusado de homicidio agravado por el vínculo y por alevosía y arriesgan penas de prisión perpetua.
Tras los alegatos y las posiciones de los defensores, llegó el dato más estremecedor. Lo iba a dar a conocer la doctora Juana Montenegro, quien recibió a Giuliano en la guardia del Hospital Notti. Describió las lesiones visibles que presentaba Giuliano en la cara y luego contó cómo al pequeño le crujía la columna producto del golpe que había recibido.
Cuando lo recibieron intentaron reanimarlo con masajes en el pecho, y en ese movimiento se sentían los crujidos.
"Cuando lo vi azul, comencé a reanimarlo y algo crujía. Es llamativo porque cuando se masajea no cruje", apuntó la médica María Polizzi, quien apuntó que la madre le decía que lo había retado y que "no largó el llanto" pero el cuadro no coincidía con un espasmo de sollozo.
El debate se extenderá durante toda esta semana, y para el martes se espera la declaración de más testigos.