El contexto de pandemia hizo de esta temporada 2022 una de las más atípicas. Mar del Plata es uno de los destinos más elegidos por los turistas y se multiplicaron las opciones de alquileres ya sea por la cantidad de ofertas, plataformas, programas del Gobierno. Un grupo de jóvenes optó por alquilar una casa alejada del centro (zona sur) y se llevaron una desagradable sorpresa.
Las jóvenes planificaron su estadía en “La Felíz”, escogieron una vivienda que contara con los servicios básicos y una adecuada higiene pero se encontraron con sábanas con sangre, muebles destrozados, vajilla sucia y ¡hasta caca en la bañera!, entre otras irregularidades. Disgustadas, decidieron documentarlo en una serie de videos publicados en la plataforma TikTok y se volvieron virales en pocas horas.
“Alquilamos esta casa porque en las fotos estaba bien y estaba cerca de las fiestas del sur. Pero todo salió mal y no era como creíamos”, relató Carolina, cuyo nombre de usuario en la famosa aplicación china es “@itscarolainn”.
“El patio estaba todo desprolijo, el patio largo, la puerta tenía una traba medieval que cualquiera podría romper el vidrio y sacarla, en las habitaciones teníamos lámparas oxidadas que parecían sacadas de un volquete”, expresó la joven.
Una de las camas tenía una madera desvencijada que la cruzaba por lo ancho, que resultó ser “una mesita para usar la computadora”. “Encima estaba recubierta por una alfombra donde parecía que le habían limpiado el culo (sic) a un elefante”, agregó.
Lo más repudiable fue el estado de la ropa de cama, donde las sábanas estaban rotas, descocidas y con mútiples manchas, algunas hemáticas.
“Recién las trajeron del laverrap”, les respondió la dueña por el estado de las sábanas. Y les comentó que esa misma mañana había concurrido una persona que limpió todas las habitaciones.
No conformes con las respuestas y justificaciones, las inquilinas creen que les “tomó el pelo” por tener 20 años. “La dueña nos dijo, antes de irse, ‘Chicas, les dejé el desayuno en la heladera’, y cuando la abrimos había solo un pedazo de manteca. Nos tomó el pelo en todo momento”, lamentó.
En la cocina encontraron utensilios sucios, como un cucharón y cubiertos, vajillas llenas de polvo y tazas con insectos muertos en su interior. Al horno solo le funcionaba una perilla y los azulejos estaban “absolutamente llenos” de sarro.
Según documentaron las imágenes de la estadía, hasta la bañera tenía un objeto oscuro que algunas de las chicas creyeron que era materia fecal. Sin embargo otras admitieron o se ilusionaron en que era parte de la suciedad y del sarro.
La denuncia también recayó sobre el control que deben tener los turistas a la hora de alquilar en plataformas que no están avaladas por los organismos de control oficiales.