El presidente de la Cooperativa de Armadores de Pesca del Puerto de Vigo (ARVI) y portavoz de la Asociación de Empresas Comunitarias y Sociedades Mixtas de Pesca en Vigo, Javier Touza, adelantó la noticia en el marco de la presentación de las VIII Conferencia Internacional ARVI sobre el Futuro de la Pesca, que tendrá lugar el 27 y 28 de septiembre y que este año estará dedicado al “level playing field” (campo de juego nivelado) en el sector y el papel que juegan los sellos de certificación y marcas sectoriales en este objetivo.
Javier Touza anunció que se encuentran trabajando con el gobierno británico en Malvinas para la certificación MSC y están en la etapa de evaluación previa al inicio de la actividad pesquera. Esta acción la llevan a delante 16 buques de arrastre que pertenecen a la flota gallega y operan al norte de Malvinas, en la captura del calamar loligo patagónico. Esta producción se destina, en su gran mayoría, al mercado de la Unión Europea y alimenta gran parte del sudeste europeo. El viejo continente ya autorizo 75.000 toneladas para los próximos 3 años, evitando que la flota deba pagar un 6% de arancel al ingresar su producción a Europa como consecuencia del BREXIT.
Si bien, recientemente un grupo de empresas, donde participaban representantes españoles, anunciaban una coalición para eliminar el calamar generado por pesca ilegal de las cadenas de suministro mundiales, producir faenas en aguas circundantes a Malvinas y comercializarlas dentro de la Unión Europea y otras partes del mundo, también serían ilegales. Esto se debe a que las aguas y los recursos en el sector de Malvinas están en disputa entre Argentina y Reino Unido. Entonces, si se busca certificar productos de mar, cuya procedencia sería las aguas circundantes a este archipiélago, sería no documentada y no reglamentada, por ende sería ilegal.
Por otro lado, es preocupante que España obre de esta manera, ya que desde el punto de vista diplomático, al menos, debería haber dado un rol protagónico o participativo a nuestro país a través de la Cancillería Argentina.
Cabe destacar que, hace 4 años, el gobierno español había anunciado el retiro de los buques de arrastre en Ecosistemas Marinos Vulnerables (EMV) circundantes a Malvinas. Hoy parece que se ha cambiado de parecer. Esta faena va en contra de lo establecido en las certificaciones MSC (Consejo de Administración Marina), dado que las certificaciones MSC o sello del pez azul sólo se concede a pescado o marisco de captura salvaje procedente de pesquerías que han sido certificadas en base al estándar, un indicador científico de pesca sostenible, cuyos parámetros se edifican sobre una fuente certificada, manipulado con precaución, creíble, confiable y bioseguro; eximiendo toda captura con procesos agresivos y/o no saludables con la biodiversidad, cosa que la pesca de arrastre no cumple, ya que atenta contra la vida de especies que coexisten en el lecho marítimo.