Los concejales de la ciudad de La Rioja no se caracterizan por el arduo trabajo en la confección de proyectos que beneficien a los ciudadanos ni por las gestiones ante las autoridades municipales para mejorar la calidad de vida de la comunidad. Por el contrario, son protagonistas permanentes de escándalos insólitos que rozan lo vergonzoso
Este miércoles, luego de casi dos meses de actividad paralizada en el Recinto Santo Tomás Moro, los ediles retomaron las sesiones pero estuvo marcada por varias particularidades. Una de ellas, es que las autoridades decidieron quitar una de las 15 bancas, para evitar que el dirigente Alfredo Menem no tuviera lugar donde sentarse.
Menem, es el concejal número 15, que desde hace más de un año y medio viene reclamando su incorporación al cuerpo de ediles luego de la asunción de Oscar Luna como vice intendente.
El viceintendente Oscar Luna se negaba a iniciar la sesión ante la presencia del dirigente, y a pesar de sus pedidos, una vez mas, la policía no quiso asistir al lugar para establecer el órden. En ese momento apareció un taxista, y al igual que otros trabajadores del sector, exigía el tratamiento de un aumento en la tarifa para el sector.
Al grito de "Necesitamos que nos solucionen el tema. Menem, dejá de hinchas las b... chango; raja a la m... loco" tomó protagonismo mientras, atónitos, el resto de los funcionarios y el público presente era testigo de lo ocurrido.