En agosto pasado, en el marco de la conmemoración del Éxodo Jujeño de 1812, el gobernador Carlos Sadir y la vicepresidente de la Nación, Victoria Villarruel, presidieron el acto de apertura oficial del Cabildo Histórico de Jujuy tras la culminación de una ambiciosa obra que incluyó la revalorización del patrimonio arquitectónico y la creación de nuevos espacios en el predio que comprende tanto el edificio histórico como al Sitio de Memoria.
Éste último se trata de un sector que mientras el cabildo -situado frente a la plaza principal de la ciudad- era sede de la Central de Policía, fue asiento del Comando Radioeléctrico de la fuerza provincial y en los fatídicos años ‘70 funcionó como un centro clandestino de detención.
“Para nosotros es importante poder preservar un lugar donde podamos, como familiares, tener un lugar para rendir homenaje a los desaparecidos y que sean reconocidos por la provincia”, dijo la coordinadora de la Casa de Madres de Detenidos y Desaparecidos de Jujuy, María Eugenia Villada, tras participar como invitada en una reunión con la Comisión de Derechos Humanos de la Legislatura de Jujuy.
TESTIMONIOS PARA NO OLVIDAR
Presidida por el diputado Juan Ramón Brajcich, la comisión parlamentaria recibió en dos encuentros a miembros de organismos de Derechos Humanos y a familiares de víctimas de tortura y desaparición forzada durante el gobierno de facto, en Jujuy. El objetivo de los legisladores es propiciar “que los mismos puedan tener mayor intervención en este espacio de memoria”, señaló Brajcich.
Las reuniones “fueron positivas”, valoró el diputado del oficialismo, a la vez de comentar que “estaba pendiente escuchar a los organismos de derechos humanos, aquellos que tienen personería jurídica y aquellos que no, y aquellas particulares que tuvieron intervención como querellantes y quisieran expresarse con vivencias particulares de familiares”.
“Escucharlos hoy fue realmente conmovedor, porque hay mucha emocionalidad en cómo lo cuentan”, definió.
El proyecto de puesta en valor y refuncionalización del Cabildo de Jujuy a cargo de la Dirección Provincial de Arquitectura, implicó la restauración del edificio histórico, la construcción de nuevos espacios y la preservación del sitio de memoria, y su materialización es considerada por el Gobierno jujeño “un hito en obras por el patrimonio histórico, la identidad nacional y la revitalización del centro de la capital provincial”.
“Todavía hay cuestiones por saldar entre los organismos -agregó Brajcich- para terminar de concluir sus intervenciones” en lo que respecta a la preservación del antiguo local del Comando Radioeléctrico como sitio de memoria.
El propósito de este diálogo en la Legislatura es recoger esos aportes, “enviarlos al Poder Ejecutivo y así poder transmitir la mirada de ellos” -remarcó- acerca de “qué y cómo contar la historia de todo lo que se vivió en la época nefasta que fue el gobierno de facto” que usurpó el poder en 1976.
En esa misma línea María Eugenia Villada agradeció que “esté la voluntad política de este gobierno de hacer de este lugar un sitio de memoria. La gente de la comisión (de Derechos Humanos de la Legislatura) nos quería escuchar y eso es muy bueno”, destacó finalmente la referente.