En lo que será la única celebración del día en todo el territorio diocesano, el obispado de Jujuy anunció que este domingo se oficiará en el atrio de la catedral del Santísimo Salvador a partir de las 17:00 una misa en acción de gracias por los nuevos beatos de la Iglesia católica, el jujeño Pedro Ortiz de Zárate y el italiano Juan Antonio Solinas SJ.
//Mirá también: ¡Aleluya!: la Iglesia católica ya venera al primer beato jujeño
Este sábado ante una multitud congregada en la ciudad salteña de Orán, en una celebración eucarística que presidió el cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos del Vaticano, se concretó la beatificación de ambos religiosos, quienes dieron su vida por la fe y pasaron a la posteridad como “los mártires del Zenta”.
En su homilía Semeraro refirió que aunque su historia es “lejana en el tiempo, pero singularmente por algunos detalles sangrientos también lejana de nuestra sensibilidad”, afirmó que “con el martirio de los beatos mártires Pedro y Juan Antonio estamos celebrando la primavera de la Iglesia”.
Voceros de la diócesis local informaron que en el transcurso de la misa de este domingo se firmará un acta “para asentar el significado de tan histórico acontecimiento para la Iglesia en la Argentina” y se entronizará una imagen del mártir Pedro Ortiz de Zárate en el templo central de la capital jujeña.
La misa será presidida por el obispo de Jujuy, monseñor César Daniel Fernández, y concelebrada por monseñor Luis Antonio Scozzina OFM, obispo de Orán; monseñor Mario Antonio Cargnello, arzobispo de Salta; monseñor Darío Rubén Quintana OAR, obispo prelado de Cafayate; monseñor José María Arancibia, arzobispo emérito de Mendoza; monseñor Félix Paredes Cruz CRL, obispo prelado de Humahuaca; monseñor Pedro María Olmedo CMF, obispo emérito de Humahuaca, y por el obispo de Gualeguaychú, monseñor Héctor Luis Zordán MSsCc.
¿QUIÉNES ERAN LOS MÁRTIRES DEL ZENTA?
Los sacerdotes beatificados fueron martirizados mientras realizaban su labor misionera entre tobas, mocovíes y mataguayos en 1683, en el Valle del Zenta, región perteneciente a lo que actualmente es territorio argentino.
“El martirio de nuestros dos beatos nos resulta bien conocido. Fueron, el uno y el otro, ministros de la primera evangelización”, señaló en su homilía el cardenal Semeraro y destacó: “Del beato Pedro, natural de esta tierra argentina, se podría decir lo que decían de Tomás Moro: fue un hombre para todas las épocas. Testigo de Cristo, buen político, buen marido, buen padre, luego un excelente sacerdote, que conocía bien a los indios y los defendía”.
//Mirá también: La noticia del año: la beatificación del mártir Pedro Ortiz de Zárate
En tanto, “el beato Juan Antonio era italiano, natural de Cerdeña, ingresó a la Compañía de Jesús e inmediatamente después de su ordenación sacerdotal llegó aquí dedicándose también a la evangelización de los indios”, describió, para añadir que “los testimonios han destacado su generosa entrega a necesidades espirituales y materiales, así como la atención pastoral en favor de españoles que habitaban aquí. Fue el impulso misionero el que los condujo a un encuentro mutuo”.
“Juntos se pusieron al servicio del Evangelio y fueron fieles hasta el derramamiento de su sangre”, reflexionó el purpurado.
El obispado jujeño informó que la misa de este domingo por la tarde en la Catedral de San Salvador de Jujuy será la única celebración del día en todo el territorio diocesano.