A pesar de la existencia de medicamentos antihipertensivos, el control de la hipertensión sigue siendo insatisfactorio y la hipertensión arterial (HTA) es el principal factor de riesgo de enfermedades cardiovasculares. Un estudio realizado por la Universidad de La Plata (UNLP) demostró que un tratamiento oral con aceite de cannabis puede mejorar el tratamiento.
Qué plantea el estudio
El estudio fue realizado por las Facultades de Ciencias Médicas, de Ciencias Exactas, y de Ciencias Veterinarias de la UNLP y se publicó en la revista científica internacional Cannabis and Cannabinoid Research. La investigación comenzó por una inquietud personal de la Dra. Erica Vanesa Pereyra, docente de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNLP y profesional de apoyo adjunto del CONICET, quien se interesó en el uso del aceite de cannabis para su madre, que padecía hipertensión, hipertrofia cardíaca y dolores musculares. A pesar de que ella debía tomar múltiples medicamentos que no siempre eran efectivos, esto la llevó a proponer a su directora, la Dra. Irene L. Ennis, profesora titular de Fisiología y Física Biológica, y jefa del departamento de Ciencias Fisiológicas, investigar el efecto del aceite de cannabis en un modelo de hipertensión, lo que marcó el inicio del estudio.
La investigación analizó el efecto del tratamiento con aceite de cannabis en ratas espontáneamente hipertensas, un modelo animal reconocido para investigar la hipertensión arterial esencial. Pereyra explicó: “Diariamente se les proporcionó a ratas hipertensas aceite de cannabis por vía oral, en una dosis similar a la que se utiliza para tratar a pacientes con epilepsia refractaria. Al finalizar la cuarta semana de tratamiento se constató no solo una reducción de la hipertrofia cardíaca, sino que además una mejoría en la función contráctil y la capacidad antioxidante del corazón, así como en la población mitocondrial”.
Qué resultados se obtuvieron
Este estudio se propuso desarrollar una nueva estrategia terapéutica para mejorar la salud cardiovascular mediante el uso de aceite de cannabis. Los resultados establecen las bases para futuros proyectos sobre su uso medicinal.
Las investigaciones sobre los efectos adversos del cannabis estuvieron mayormente dirigidas a fumadores, donde se asociaron con problemas como infarto de miocardio y arritmias. Sin embargo, estos efectos pueden estar relacionados con sustancias tóxicas del tabaco o con la combinación de cannabis con otras drogas.
El trabajo de Pereyra y su equipo es pionero en investigar los efectos cardiovasculares del tratamiento oral crónico con aceite de cannabis en un modelo de hipertensión. Los hallazgos indican que este método puede ser eficaz para reducir la hipertrofia y mejorar la función mitocondrial en el miocardio.