Guerra de Malvinas, 40 años: por qué Argentina reclama las Islas

Varios motivos, desde geográficos hasta históricos, son los que argumenta la Argentina para reclamar su soberanía en las Islas. Aquí un repaso de cada uno de ellos.

Guerra de Malvinas, 40 años: por qué Argentina reclama las Islas
Argentina históricamente reclama la soberanía en las Islas Malvinas. Foto: Los Andes.

A un par de días de cumplirse los 40 años del inicio de la guerra de Malvinas, el reclamo por la soberanía argentina en ellas sigue vigente, pero lo cierto es que el Reino Unido mantiene el control sobre su territorio.

Un cartel en inglés en Puerto Argentino da la bienvenida a las Islas Malvinas.
Un cartel en inglés en Puerto Argentino da la bienvenida a las Islas Malvinas.

Pero el reclamo histórico de forma diplomática Argentina lo viene manteniendo desde hace gran cantidad de décadas, con el gran paréntesis que fue la guerra de 1982. Cabe mencionar que la corona británica tiene el control de las Islas desde el siglo XIX.

Y el conflicto bélico vino a romper con esa seguidilla de reclamos diplomáticos argentinos, desatando una ocupación por la fuerza y una posterior guerra que acabó con la vida de 649 soldados nacionales, 255 británicos muertos y la derrota de Argentina y el control absoluto del país europeo.

Por qué se las considera a las Islas Malvinas como argentinas

Las Islas Malvinas son un archipiélago que se sitúa geográficamente dentro del Mar Argentino. A su vez, son parte de la lista de 17 territorios “no autónomos” considerados por la Organización de Naciones Unidas (ONU) y esta misma organización reconoce como legítimos los reclamos argentinos sobre la soberanía en las Islas, pero considera a su vez al Reino Unido como “administrador” del territorio, aunque no le da la soberanía.

La bandera Argentina en el cementerio Darwin, desplegada a manos de un grupo de veteranos de la guerra.
La bandera Argentina en el cementerio Darwin, desplegada a manos de un grupo de veteranos de la guerra.

Los reclamos argentinos sobre las Malvinas datan de muchísimo tiempo y se sostienen en elementos de derecho geográfico, así como también derechos históricos. A su vez, derechos jurídicos también son tenidos en cuenta.

Es por ello que el elemento topográfico natural de la zona es un argumento sumamente relevante a la hora de reclamar las Malvinas como argentinas. Esto se debe a que su ubicación las sitúa frente a las costas nacionales dentro de la plataforma continental patagónica. Esto remite a que son una continuidad geológica.

Además, la postura se sostiene en el antecedente histórico que utilizó la corona española cuando reivindicó a las Malvinas como parte del continente.

Respecto del derecho histórico, se las reconoce como parte de las tierras que formaban el Virreinato del Río de la Plata y, por lo tanto, al haberle declarado la independencia en 1816, nuestro país automáticamente reclama su soberanía sobre las Islas.

Incluso, un decreto del 10 de junio de 1829 emitido por el Gobierno de Buenos Aires durante la gestión de Juan Lavalle, determina que “el consentimiento de las principales potencias marítimas de Europa y por la adyacencia de estas islas al continente que formaba el Virreinato de Buenos-Ayres, de cuyo Gobierno dependían”.

Lo que sostiene el Reino Unido para ocupar las Malvinas

Pero la disputa también la sostiene Reino Unido al afirmar que las Islas Malvinas ya fueron ocupadas por ellos en 1765, lo que implica que es una fecha anterior incluso a la existencia de la República Argentina. Sin embargo, en 1774 debieron abandonarlas debido a presiones económicas.

Así y todo, las Islas para aquel momento eran consideradas españolas, dado el control territorial de la época de las colonias, y este argumento viene a refutar aquel que plantea la posición del Reino Unido como soberano ante la no existencia de Argentina.

La sucesión histórica de la ocupación de las Islas Malvinas

Para el año 1825 tuvo lugar el Tratado de Paz y Amistad, donde Inglaterra aceptó que las Islas le pertenecían a la Argentina. Sin embargo, el 3 de enero de 1833, el capitán J.J. Onslow, del barco de guerra británico Clío, desembarcó en ellas, sacó la bandera argentina y tomó el control territorial.

Hay que mencionar, a su vez, que en la propia Constitución Nacional se expresa que: “La Nación Argentina ratifica su legítima e imprescriptible soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes, por ser parte integrante del territorio nacional”.

Una vista panorámica de Puerto Argentino, en las Islas Malvinas
Una vista panorámica de Puerto Argentino, en las Islas Malvinas

Y es por ello que Argentina siempre reclamó su soberanía en ellas, sin aceptar la usurpación de las Islas ni el acta de rendición firmada en Puerto Argentino el 14 de junio de 1982.