El dólar y la Argentina siempre son dos cuestiones que se emparentan permanentemente, pero que generan grandes inconvenientes entre sí. Si no, que lo diga la banda británica Coldplay que se ve envuelta en este problema en su visita a nuestro país.
Cabe destacar que la banda recientemente rompió todo un récord al confirmar que las entradas se encuentran agotadas para los 10 shows que tienen programados realizar en Argentina para la primavera.
“Es increíble, estamos tan agradecidos por este récord”, comentó el líder Chris Martin emocionado. Con esto, le lograron arrebatar la marca histórica al inglés Roger Waters que en marzo de 2012 completó nueve estadios de River Plate.
El “cepo” cambiario que restringe el acceso a los dólares de Coldplay
Tanto en 2012, con el récord de Roger Waters como en la actualidad, se mantiene en Argentina la misma cuestión económica relacionada con los dólares: el “cepo” cambiario, que genera la restricción de acceder a los dólares oficiales que vende el Banco Central.
Lo cierto es que el Gobierno Nacional menciona que el grupo empresario encargado de traer a los músicos está incumpliendo requisitos propios de la AFIP.
Por los recitales, Coldplay cobrará alrededor de U$S15 millones, a U$$1,5 millón por show. Y es que las entradas que están a la venta y ya agotadas costaban entre $8.000 y hasta $19.500, lo que equivale a U$S40 y hasta U$S100 si se hace la conversión al dólar libre.
Pero el problema surge con la empresa DF Entertainment, la encargada de que los británicos lleguen a nuestro país, la cual no pudo acceder a los dólares que posee el Banco Central para pagar los shows.
¿Qué pasó con los dólares oficiales para Coldplay?
Según evidencian fuentes oficiales, DF Entertainment fue rechazado para poder acceder al mercado de cambio. Esto significa que los organizadores llegaron al paso previo que significa el pedido de los dólares en el Banco Central.
Allí incumplieron con determinados requisitos básicos que solicita la AFIP, la cual verifica la “capacidad económica y financiera” de los propios importadores, paso previo a darle acceso a la operación internacional.