Desde el ejecutivo nacional del vecino país de Brasil, oficializaron desde este jueves el cierre de las fronteras terrestres con los países vecinos de América del Sur. El cierre se aplica a las rutas y otros medios terrestres, pero no a los aeropuertos y es una medida decidida en concordancia con la emergencia sanitaria que atraviesa el mundo entero.
Quienes tendrán el ingreso restringido serán los extranjeros que se encuentran en los países vecinos y desean ingresar a Brasil. Sin embargo, los ciudadanos brasileños que se encuentran en estos lugares podrán volver a ingresar a Brasil, así como también los camiones con cargas como los agentes de acción humanitaria. En un principio la medida se aplicará por un periodo de 15 días.
“La restricción fue impuesta por recomendación técnica y razonada de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria”, explicaron desde el gobierno nacional brasilero. Quien no cumpla con la restricción será deportado de inmediato y no podrá solicitar refugio. La medida se aplica a la entrada de extranjeros de los siguientes países vecinos, Argentina, Bolivia, Colombia, Guyana, Guyana Francesa, Paraguay y Perú. Mientras que el cierre de la frontera con Uruguay es negociado por los gobiernos de los dos países.