El jefe de Policía de Concordia, José María Rosatelli, brindó una entrevista radial, donde expresó su conmoción por el desarrollo del caso que involucra a Pablo Laurta, detenido por el doble femicidio en Córdoba y sospechado ahora del asesinato de Martín Sebastián Palacios, el chofer oriundo de San Salvador desaparecido días antes del crimen.
“Nunca vi un hecho de esta magnitud”, afirmó Rosatelli, al referirse al alcance del raid criminal. “Comenzó por Uruguay, pasó por Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, y con esta cantidad de muertes, en una secuencia de acciones para ocultar”, detalló.

El hallazgo de restos humanos y las sospechas sobre Laurta
Según explicó el comisario, la Policía Científica trabaja sobre los restos hallados en una zona rural de Concordia, en bolsas de consorcio. Aunque la data de muerte coincide con la fecha de desaparición de Palacios, todavía se aguarda la confirmación oficial de la identidad.
“El cuerpo estaba muy sucio por diferentes circunstancias”, señaló Rosatelli en declaraciones a Radio Máxima, y agregó que “a simple vista parecían cortes realizados con un cuchillo. Cortó las extremidades y la cabeza”.
Los familiares de la víctima ya fueron convocados para realizar el reconocimiento, y en caso de ser necesario, se aplicarán pruebas de ADN, aunque su procesamiento podría demorar varios días más.

Rosatelli confirmó que actualmente hay más de 100 efectivos afectados a las tareas de búsqueda de los restos faltantes en la zona, donde se presume que parte del cuerpo pudo haber sido removido por animales.
Un accionar planificado y sin cómplices
El funcionario policial también detalló los elementos secuestrados durante el procedimiento en Gualeguaychú, ciudad donde Laurta fue detenido el domingo: un arma, prendas con manchas de sangre, una tarjeta verde y su billetera. Además, se localizó una piragua que habría sido utilizada por el acusado para cruzar desde Uruguay, y se logró identificar el auto que dejó en ese país.
En cuanto al posible vínculo entre Laurta y Palacios, Rosatelli fue contundente: “No hemos encontrado indicios de que alguien lo haya ayudado. Tampoco hay elementos que hablen de un conflicto entre ellos. La teoría fuerte es que Laurta iba ocultando todo y que su accionar fue planificado desde Uruguay”.
Un caso sin precedentes
Con declaraciones que reflejan la gravedad del caso, Rosatelli insistió en que en sus dos décadas de trayectoria en la Policía Científica nunca enfrentó un hecho de esta dimensión, tanto por la brutalidad como por el recorrido del acusado.
El avance de la causa, que ya investiga crímenes en al menos dos provincias argentinas y movimientos internacionales, sigue sumando elementos que complican a Laurta. Por ahora, permanece detenido en Gualeguaychú a la espera de su traslado y de nuevas imputaciones.