En la jornada de ayer, amigos y familiares de seres queridos que descansan en el Cementerio Católico del kilómetro 11 de Eldorado reportaron a el robo de un gran número de placas de bronce de las tumbas.
Poco importa a los malvivientes la solemnidad del lugar a la hora de cumplir con sus cometidos y hacerse con estos metales que luego, según creen los damnificados, se venden como chatarra.
Fuente: Eldópolis